Sevilla entra en el circuito de los grandes conciertos de la mano de los Premios MTV

Gira la ruleta y la siguiente gran cita cultural en Sevilla tendrá lugar en noviembre. En menos de tres años la capital ha acogido eventos que la han convertido en referente, primero nacional, luego europeo y ahora internacional en el mundo de la industria cultural: Premios Forqué, Ondas, Max, Premios de la Academia Europea del Cine, Goya y... ahora los Premios MTV también en Sevilla.

Casilla tras casilla. No parece una mera una cuestión de suerte, sino el fruto de una estrategia municipal trazada en los últimos cuatro años. Un evento ha servido de carta de presentación para el siguiente y así se han ido abriendo puertas sucesivamente.

¿Por qué Sevilla acogerá la entrega de la 2ª edición de los Premios MTV (EMA)? La fiesta internacional de la música es la guinda que cierra el mandato del actual gobierno municipal, cuyo propósito ha sido incorporar a Sevilla a los grandes circuitos culturales.

La experiencia del Año Murillo abrió la puerta en el sector de las exposiciones, fue la mejor credencial; en el terreno del cine el camino ya estaba iniciado gracias a un festival consolidado; y en el campo musical lo más razonable parecía ir de la mano de grandes marcas como Gramy o MTV. Y con ambas ha habido contactos.

Durante el último año, el Ayuntamiento de Sevilla ha negociado intensamente con la cadena estadounidense MTV, con la que hubo mayor conexión. En los últimos meses se han celebrado tres reuniones con máximos responsables de Viacom, conglomerado mediático estadounidense del que forma parte la cadena, como son Raffaele Annecchino, máximo responsable de la empresa para el Sur y Oeste de Europa, Oriente Medio y África, y Manuel Gil, diretor general de la MTV en España.

La experiencia de Bilbao, que acogió la última gala de los Premios Europeos de la MTV, acabó por convencer al equipo del concejal Antonio Muñoz de la necesidad de apostar por este evento, que sólo se había celebrado antes en España en dos ocasiones, en las dos grandes capitales: Barcelona (2002) y Madrid (2010). La propuesta municipal fijaba la solicitud de Sevilla en 2020 ó 2021. Antes no parecía razonable. Pero el equipo de los Premios MTV, tras comprobar el resultado de la organización de la gala de los Premios Goya, adelantó el sí quiero.

El gran momento de la ciudad

"Tenemos que aprovechar la buena reputación de la ciudad de Sevilla", apunta el delegado de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, convencido de que la capital puede ser "el epicentro del sur de España y Portugal para las grandes citas musicales de cada año".

No es el único. Del atractivo de la ciudad para los promotores musicales da buena fe Manuel Saucedo, consejero delegado de Impulsa Eventos e Instalaciones, la firma que gestiona el Palacio de Deportes de Madrid, ahora WiZink Center, y uno de los portavoces de los promotores del complejo Sevilla Park. "Sevilla es una plaza por la que merece la pena apostar y que necesita un gran pabellón multiusos", asegura convencido también de que la capital hispalense debería figurar en la siguiente liga de los conciertos: Lisboa, Madrid, Valencia y Barcelona, que si bien había jugado siempre con la ventaja que supone estar más cerca de la frontera con Europa, vive momentos bajos coincidiendo con la crisis política. Cada vez se venden menos entradas y se programa menos en la Ciudad Condal, en beneficio de Madrid básicamente.

La ciudad con más espacios escénicos y sin pabellón

Sevilla, coinciden ambos, está en la mente de los promotores que, a pesar de las dificultades con las que se ha topado el proyecto Sevilla Park, no han tirado la toalla. Después del cierre del Estadio de la Cartuja, cuyo estado de las cubiertas impide su utilización, el escenario alternativo para este tipo de macroconciertos son los estadios de fútbol y el del Betis ya está preparado para ello, con tres citas ya programadas este mes de junio. El complejo en los terrenos portuarios, cuya tramitación parece que avanza actualmente, no sería una realidad hasta dentro de dos años como mínimo. Así que hay que pensar en alternativas.

"Pero la ciudad tiene infraestructuras, público y cultura musical como para estar en los circuitos de los grandes conciertos", reitera el concejal, que recuerda que, a excepción de Madrid y Barcelona, Sevilla es la capital con más espacios escénicos tanto públicos como privados y, sobre todo, de gran capacidad. Desde el Auditorio de Fibes o el Rocío Jurado, al Cartuja Center CITE, Teatro de la Maestranza, Teatro Central, Teatro Lope de Vega, Teatro Alameda, Sala Turina, Teatro Quintero, Box Cartuja o incluso el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo, que acoge festivales. Recintos menores como el Teatro Távora, La Fundición, Viento Sur, Sala Cero, TNT. O salas para conciertos con una programación permanente y ya con historia como son el Fun Club, Sala Custom, Malandar, Sala X, Even, La Sala o Fanatic, entre otros espacios. Algunos de ellos, sin estar en su mejor estado de conservación, tienen una programación permanente.

Y, sin duda, este entorno cultural en el que se mueve la capital ha sido un punto positivo para la MTV. Según ha podido saber este periódico, la elección de la sede depende de distintos factores: desde el recinto, y en este caso el Auditorio de Fibes es un escenario puntero en España; hasta el entorno, el de la capital es privilegiado en el mundo; y la escena musical del momento, y no cabe duda de que en Sevilla sobra talento y también emprendedores.

También, está claro, la relación de la empresa con la ciudad y, en este caso, desde que se iniciaron los primeros contactos el entendimiento ha sido mutuo. Desde la MTV se ha valorado mucho la buena posición que tiene en el mapa Sevilla como destino turístico y la mezcla de historia, cultura, música e innovación que venden sus gestores. Incluso también se habría considerado el reconocimiento que logró la ciudad en 2006 de parte de la Unesco como primera Ciudad de la Música.

¿Qué coste tendrá el evento para la ciudad?

Aún es pronto para hacer cálculos. Al menos, desde el Ayuntamiento de Sevilla se apunta que la campaña internacional en términos de visibilidad y retorno económico con los Premios MTV es incalculable y se valora que la capital sea de nuevo referente mundial, en esta caso, del mundo de la música y la cultura pop. Por lo que se estima que la inversión realizada desde las arcas municipales se amortizará con creces, superando el impacto de los Goya. Como apunte algunos datos que aporta la organización de la anterior gala en Bilbao y que llenó los hoteles y restaurantes de la ciudad. La previsión es que se superen las 5.500 habitaciones de hotel durante una semana.

No obstante, la intención es que los premios 2019 se distingan también de los celebrados en Bilbao. De hecho, están hechos a medida de la ciudad. Tanto MTV como el Ayuntamiento de Sevilla buscan proyectar una imagen icónica en el gran concierto programado para el sábado anterior a la gala. En Bilbao esta cita se celebró en el estadio de San Mamés. Aquí se busca algo más espectacular, monumental. Y, de hecho, se baraja la Plaza de España como escenario, aunque este punto todavía no se ha cerrado al existir varios contras que hay que salvar previamente. Sería la opción preferida. Alternativa podría ser un estadio de fútbol y el del Betis se está preparando en los últimos meses para ofrecer estos servicios.

Los conciertos de esta magnitud suelen atraer a bastante público y, hasta ahora, han llegado a Sevilla con cuentagotas. "De la mano de la MTV voy a tener citas con dos de los grandes organizadores de macroconciertos de música y Sevilla puede entrar definitivamente en esos circuitos", apunta Antonio Muñoz. Estas citas, hasta ahora, han sido esporádicas: Madonna, Bruce Springsteen, U2 o ACDC que en 2016 llenó todos los hoteles de la ciudad.

Sevilla quiere apuntarse también al turismo musical con los Premios MTV. A una escala que no es sólo la de los festivales, que también tiene la ciudad y generan un movimiento destacado que llega desde toda Andalucía, Extremadura y parte de Portugal. El gobierno de Juan Espadas quiere exprimir al máximo el efecto ruleta que ha conseguido con su estrategia de posicionamiento de la ciudad en el mapa del mundo. También de la música.