El servicio de Radiodiagnóstico del Valme optimiza la calidad y seguridad de sus cuidados enfermeros

A la izquierda el supervisor de Enfermería del Área de Gestión Sanitaria Sur de Sevilla, Javier Román, acompañado del enfermero Cristóbal Rodríguez cumplimentado la Hoja de Continuidad de Cuidados, en formato digital, dentro de las instalaciones de la resonancia magnética. / M. G.

El servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha avanzado en calidad y seguridad de los cuidados enfermeros con la digitalización del registro de continuidad de cuidados.

Se trata de una medida realizada en colaboración con su Equipo TIC que facilita el acceso a esta fuente relevante de información, incorporándola a la Historia Clínica Digital. De este modo, evita que se interrumpa la documentación en la cadena de cuidados durante los procedimientos diagnósticos y no signifique una discontinuidad de la atención clínica, detalla el centro en un comunicado.

Aunque el paso de los pacientes por el servicio de Radiodiagnóstico es por un tiempo determinado, habitualmente corto, en él se llevan a cabo diversos procedimientos que pueden ser tributarios de determinados cuidados enfermeros paralelos a las tareas técnicas. Es el caso de exploraciones y pruebas diagnósticas intervencionistas con contrastes intravenosos, contrastes por vía oral, punciones, drenajes.

Al respecto, la Hoja de Continuidad de Cuidados es un registro que tiene como objetivo servir de soporte documental para que, cuando los pacientes sean dados de alta de este servicio, quede contemplada la información, incidencias y recomendaciones enfermeras. Por tanto, sirve de hilo conductor para el servicio hospitalario de origen o bien en atención primaria; así como también para que cuando vuelva a Radiodiagnóstico para pruebas sucesivas se eviten incidencias clínicas previamente detectadas.

Este registro se aplica en todos los procedimientos de intervencionismo sobre el paciente que se realizan en el servicio de Radiodiagnóstico: punciones, drenajes, contrastes en Tac, resonancias, ecografías y mamografías e intervencionismo sobre las distintas patologías (vasculares, ginecológicas, urológicas, endocrinas).

El documento está estructurado por datos demográficos, valoración inicial del enfermero atendiendo a antecedentes clínicos de interés, valoración según diagnóstico enfermero, aplicación de medidas enfermeras, así como también recoge el proceso realizado y las recomendaciones para la post-exploración.

En consecuencia, esta hoja digitalizada potencia la seguridad asistencial al quedar recogido si presenta riesgo por medicaciones en tratamiento de patologías concretas, si presenta incidencias durante su estancia en el servicio de Radiodiagnóstico, si ha precisado de atención concreta.

A la importancia de que este registro esté activado para la continuidad de cuidados, desde el hospital de Valme se aporta como valor añadido su digitalización. De este modo, la información puede ser integrada en la Historia Clínica Digital del paciente y permite su consulta por profesionales en cualquier centro sanitario de Andalucía.

Por su parte, el supervisor de enfermería de Radiodiagnóstico, Javier Román, ha destacado que "su digitalización incide especialmente sobre la calidad y seguridad de los cuidados enfermeros, dado que es una herramienta que permite la trazabilidad de cuidados de todos los procedimientos diagnósticos, a los cuales facilitamos el acceso para los profesionales".