Así será el nuevo Centro de la Memoria Histórica de Sevilla en la antigua cárcel de La Ranilla

La exposición permanente estará compuesta por seis salas que abarcarán desde el reinado de Alfonso XIII hasta la historia de la prisión

Las obras para convertir la Ranilla en un centro de la Memoria Histórica arrancan en 2024

Una joven pasea a su perro frente a la antigua prisión de La Ranilla en Nervión.
Una joven pasea a su perro frente a la antigua prisión de La Ranilla en Nervión. / Juan Carlos Vázquez

Un espacio expositivo y centro de documentación, archivo e investigación científica de la memoria histórica de la ciudad. Sobre este eje gira la reconversión de la antigua cárcel de La Ranilla, que dejó de ser Prisión Provincial en 1991, en el nuevo Centro de la Memoria Histórica de Sevilla. A través de su vertiente expositiva, divulgativa y de estudio e investigación busca convertirse en una fortaleza contra el olvido. Un espacio que nace dentro de un contexto en el que ya existen museos y centros memorialistas en España y en diferentes partes del mundo. Con estos objetivos, la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha sacado a licitación el contrato del servicio para la redacción del plan museológico.

Localización del nuevo museo
Localización del nuevo museo / Dpto. Infografía

En septiembre del pasado año, comenzaron las obras incluidas en la primera fase de rehabilitación, con las que se renovará la estructura horizontal y las cubiertas del edificio. Se impide así que el deterioro continúe hasta que se aborde el proyecto de segunda fase de rehabilitación y de adaptación a centro de la Memoria, previa elaboración del plan museológico cuya redacción tendrá un plazo de seis meses y un presupuesto total de 40.777 euros (IVA incluido).

Este inmueble, lo que queda de él después que fuera demolido excepto el pabellón de ingresos, levantó sus muros en 1933. Su ubicación, como la del Matadero Municipal, vino determinada por el plan diseñado por Aníbal González en 1911 para el nuevo barrio de Nervión. Como se ha mencionado antes, dejó de ser Prisión Provincial en 1991, convirtiéndose en un centro de tercer grado hasta 2006. En el año 2004 se negociaron, mediante convenio entre el Ayuntamiento de Sevilla y la Sociedad Estatal de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios, las condiciones de eliminación del centro penitenciario, que quedarían reflejadas en el nuevo PGOU de 2006: "una nueva área presidida por un gran espacio libre, zona de equipamientos y presencia de suelos residenciales, para así mejorar las dotaciones del barrio de Nervión".

De este modo, se consensuó la conservación del pabellón de ingreso con un uso previsto como sociocultural. En 2008 se derribaron las galerías y la mayor parte del recinto, menos el cuerpo de guardia y las oficinas, declarados Lugar de la Memoria Histórica en 2012.

Según el documento al que ha tenido acceso este periódico, el Centro de la Memoria Histórica de Sevilla "nace como una referencia en su ámbito en la ciudad" y en Andalucía, "en contacto con otros centros similares a nivel estatal y europeo para el depósito e intercambio de información, exposiciones, publicaciones y desarrollo de jornadas temáticas". Se crea así un punto de encuentro de un amplio abanico de intereses relacionados con la investigación y la difusión "de nuestra historia contemporánea reciente, a través de sus contenidos expositivos temporales o permanentes, la biblioteca especializada, punto de información para ciudadanos e investigadores, salas de consulta de fondos documentales propios o cedidos, locales de uso público para jornadas de debate y sede de las asociaciones memorialistas de la ciudad, entre otros".

Seis salas de exposición permanente

En definitiva, "un espacio de conocimiento que integra unas funcionalidades específicas que podemos concretar a través de su misión expositiva (permanente y temporal), de estudio e investigación y de su misión divulgativa e inclusiva como espacio de interés pedagógico". Además, el informe hace especial hincapié en que el inmueble ofrece una serie de oportunidades "para favorecer los atractivos expositivos del centro y el interés general de la ciudadanía". En este sentido, "el edificio es un Bien patrimonial en sí mismo que además de funcionar como contenedor de conocimiento es soporte transmisor de experiencias vitales y expositivas. De ahí que se entienda su adaptación a las nuevas funciones expositivas en el marco de una rehabilitación respetuosa de sus espacios, interviniendo lo mínimo posible para su adecuación a la visita".

Plano de la planta baja del nuevo museo de la Memoria Histórica
Plano de la planta baja del nuevo museo de la Memoria Histórica / Dpto. Infografía

Una visita cuyo acceso será desde la calle Mariano Benlliure, manteniéndose cerrado el acceso desde el parque dado que no tiene un espacio de recepción adecuado. En la planta baja estará dispuesta la exposición permanente compuesta por un total de seis salas, empezando el recorrido justo a la izquierda de la entrada.

La secuencia de temáticas estará organizada en riguroso orden cronológico, empezando por el reinado de Alfonso XIII (1885-1931), continuando por la Segunda República (1931-1936) y por el Golpe de Estado y la Guerra de España (1936-1939). La sala dos estará dedicada por completo a La dictadura franquista (1939-1975). Continuará la visita por La democracia (1979-1982). La cuarta sala estará compuesta por audiovisuales, incluyendo un ciclo de documentales que pueden ser creados especialmente para el Centro o adquiridos. El quinto espacio se centrará en la historia de La Prisión de Ranilla (1932-2007). La exposición permanente termina en Víctimas y victimarios (1936-1982).

Un memorial en el patio central

Por otro lado, a la derecha de la entrada habrá un espacio dedicado a un archivo digital, donde los visitantes podrán acceder a un base de datos a través de pantallas digitales interactivas, incluyendo una profundización y ampliación de contenidos y documentación que pertenece al Centro. Al lado de este archivo digital habrá una sala dedicada a exposiciones temporales para ofrecer un programa de exposiciones interesantes sobre temas específicos en más detalle.

Plano de la planta baja del nuevo museo de la Memoria Histórica
Plano de la planta baja del nuevo museo de la Memoria Histórica / Dpto. Infografía

En la planta alta, para acceder al torre, hay que pasar por las terrazas exteriores, que ofrecen vistas al parque y también al patio central desde arriba. Lugares de contemplación donde, según el informe, se puede incluir paneles interpretativos que recreen los espacios exteriores de la antigua cárcel. A través de una app, se podría acceder a la reconstrucción virtual exterior, haciendo uso de la realidad aumentada, de la cárcel con sus galerías y pabellones. Una aplicación que también permitiría realizar un recorrido autoguiado por el parque y entender la estructura espacial del edificio.

Uno de los elementos principales será el patio central como "corazón del nuevo Centro". Allí se dispondrá un largo memorial físico formado por "miles y miles de pequeñas placas metálicas", cada una dedicada "a una persona, ciudadano o ciudadana de la provincia de Sevilla, víctima de la Guerra Civil y la Dictadura que la siguió". Dichas placas mostrarán una foto retrato de la persona; su nombre y apellidos; lugar y fecha de nacimiento; su profesión; y su fecha, lugar y causa de la muerte. El memorial "será suavemente iluminado en momentos de baja luz de día". Desde el jardín se podrá contemplar con una vista de 360 grados.

Otro elemento de especial significado será la inscripción que el visitante podrá encontrar en cuanto cruce la entrada principal, a través de un gran arco que da acceso al patio central. Encima de ese arco, se colocará el precepto latino Verba Volant Scripta Manent (La palabra desaparece, lo escrito permanece). Una frase que invita a la "reflexión sobre el contenido del Centro y su función, destacando la importancia de la documentación histórica y la preservación de la misma".

Para evitar la obsolescencia de los contenidos del Centro, se plantea la revisión y actualización regular de las exhibiciones. También el uso de tecnología interactiva como pantallas táctiles, que ayudarán a mantener el interés del público y a actualizar fácilmente la información. La organización de encuentros con asociaciones, mesas redondas y exposiciones temporales atraerá nuevos visitantes y mantendrá activa la oferta del espacio.

Entrada a la antigua Prisión Provincial por la calle de Mariano Benlliure
Entrada a la antigua Prisión Provincial por la calle de Mariano Benlliure / Juan Carlos Vázquez

Modelo de gestión y entradas

El plan museológico también contempla el modelo de gestión. Uno de los puntos fundamentales. Se proponen dos alternativas de funcionamiento: la gestión directa por parte del Ayuntamiento de Sevilla o la creación de una figura jurídica, un ente personificado, en forma de Fundación Pública Local. En el primer caso, se incluiría dentro el Área de Cultura y Deporte.

En el apartado de entradas y tarifas de admisión se estipulan tres tipologías:

  • Entradas generales: Cobro por la entrada a exposiciones permanentes y temporales.
  • Entradas reducidas: Tarifas reducidas para jóvenes, estudiantes, personas mayores, etc.
  • Tarifas de grupo: Descuentos para visitas en grupo o escolares.

El informe especifica que, "aunque la oferta expositiva prevista por el Centro va dirigida a una amplia diversidad de público, la oferta educativa propuesta como las visitas dialogadas, talleres pedagógicos y tertulias, tiene el potencial de atraer a determinados colectivos específicos":

  • Jóvenes y grupos de educación para adultos del entorno inmediato al Centro que tienen interés y necesidad de conocer el pasado más reciente relacionado con la Memoria Histórica.
  • Profesionales del mundo educativo y del ámbito turístico que tienen interés en profundizar en el conocimiento de la Memoria Histórica para trasladar lo aprendido a sus áreas competenciales.
  • Residentes en la provincia de Sevilla y en el resto de la comunidad, nacionales y extranjeros, con interés y tiempo para actividades formativas vinculadas con la Memoria Histórica.

En esta línea, el documento hace especial hincapié en que este nuevo espacio "es, ante todo, un espacio de conocimiento, divulgación e investigación. Es decir, no se sostiene únicamente en la visita a su exposición permanente o temporal, sino que las supera y las amplía al ser al mismo tiempo un espacio que custodiará (en diferentes formatos y soportes) el archivo documental de la Memoria Histórica de la ciudad de Sevilla y su provincia".

stats