La revolución de la movilidad

La línea 1 del Metro de Sevilla, que abrirá al completo en verano con sus 18 kilómetros, sólo representa una pequeña parte de las mejoras de transporte público que aguardan a los ciudadanos de la capital y a su área metropolitana de aquí al horizonte de 2013. Con una población actual de 1,5 millones de habitantes, la Gran Sevilla necesita la verdadera red de transporte que está proyectada: más Metro, más Cercanías, más tranvías, la conexión con el aeropuerto por Alta Velocidad y carriles exclusivos para autobuses interurbanos. Y para el tráfico privado: la SE-40 y la SE-35.

Para entonces deben estar en funcionamiento varios tramos de las líneas 2, 3 y 4 que restan para completar la red del suburbano aprobada por la Junta de Andalucía. Queda por resolver, a finales de este año con los proyectos de construcción ya redactados, la incógnita fundamental: si serán bajo tierra o en superficie.

Y por lo que respecta al aeropuerto de Sevilla, también es de esperar que esté conectado por Alta Velocidad con la estación de Santa Justa, a través de un túnel bajo la avenida Kansas City ejecutado con tuneladora.

El tranvía del centro (Prado-Plaza Nueva) también habrá crecido hasta San Bernardo y Santa Justa, como mínimo, ya que las obras empiezan este mes. En el Aljarafe estará operativo el tranvía circular y los tranvías de Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra, con conexión directa con el Metro. Para entonces deben estar cargando viajeros, al igual que el que partirá de La Rinconada a Sevilla.

El Cercanías de la capital se habrá prolongado al Estadio de la Cartuja y hasta Tablada desde la misma Cartuja. En el Aljarafe Norte, debería estar funcionando la línea de Cercanías que reutilizará las infraestructuras ferroviarias existentes entre Huelva y Sevilla.

Para mejorar la velocidad comercial, los autobuses interurbanos circularán en carriles de paso exclusivo desde Gelves a Sevilla y desde Camas a Sevilla. Y en el Puente de Hierro de San Juan, un carril para autobuses que también podrán compartir los coches particulares con la condición de que vayan llenos de viajeros, no con un solo pasajero.

Para entonces la bicicleta habrá ganado aún más terreno al coche como alternativa de transporte. Los carriles bici de la capital se habrán ampliado por encima de los 77 kilómetros actuales, y habrá aparcamientos públicos y privados de bicis en los principales transportes públicos.

En carreteras, en 2013 estará avanzada la segunda ronda SE-40 y es posible que hasta la SE-35 que ha suscitado protestas entre ecologistas y vecinos del Parque Alcosa por dañar una zona verde.