Santa Catalina reabrirá el 25 de noviembre tras 14 años cerrada

Patrimonio histórico

La rehabilitación integral encara su última fase con la construcción de una cámara perimetral de ventilación para atajar la humedad y la terminación del interior.

Aspecto del interior de la iglesia de Santa Catalina. / B. Vargas

La restauración de la iglesia de Santa Catalina ha entrado en su recta final. Los trabajos se centran actualmente en la terminación del interior del templo, con la restauración de los retablos, esculturas y pinturas, como informó este periódico la semana pasada; y en la construcción en el exterior de una cámara bufa para ventilar el interior del templo y acabar con los problemas de humedad existentes. El objetivo de la Archidiócesis, que ha destinado 3,5 millones de euros a las dos últimas fases de la rehabilitación integral del templo mudéjar, es que se pueda bendecir el próximo 25 de noviembre, día que se celebra la festividad de Santa Catalina.

La Archidiócesis ha organizado esta mañana una visita guiada al templo para comprobar los avances de la rehabilitación integral. En ella han participado el arquitecto, Francisco Jurado; el arqueólogo, Domingo Martín; el secretario general y canciller del Arzobispado, Isacio Siguero; y el Ecónomo Diocesano, Alberto Benito. "Prácticamente está todo acabado. El pavimento está colocado, la electricidad está preinstalada, se ha construido un nuevo forjado para poder visitar la cripta arqueológica y que tenga un uso diferenciado con el del propio templo", ha explicado Jurado.

El aspecto que ofrece actualmente el interior de Santa Catalina deja ver con mucha claridad las características el templo mudéjar. Para darle un aspecto "mucho más neutro" se ha colocado un pavimento blanco. Uno de los aspectos en los que ha incidido la restauración es en recuperar los vestigios de la primera iglesia que se construyó en el siglo XIII tras la Reconquista de la ciudad, un templo que fue destruido en gran parte tras el terremoto acontecido en 1390 y sobre cuyos restos se levantó el actual. Uno de los elementos que se podrán ver en su totalidad será el gran arco de herradura existente en la puerta a los pies del templo. Para que se observe en su dimensión completa se colocará un pavimente de vidrio traslúcido, ya que la cota original se encuentra ochenta centímetros más abajo. "Tuvimos un debate sobre si recuperar el nivel original, pero habría generado problemas, así que optamos por esta solución", ha apuntado el arquitecto.

Santa Catalina. Última fase de restauración.
Santa Catalina. Última fase de restauración. / Dpto. Infografía

Para hacer visitable la cripta, el equipo dirigido por Francisco Jurado ha construído una bóveda de hormigón blanco y acero inoxidable que se apoya en las basas de los pilares. "Aquí se pueden hacer una lectura del urbanismo que ha existido en esta zona de la ciudad y podemos saber qué ha ocurrido a lo largo de los siglos", ha indicado el arqueólogo Domingo Martín. Las investigaciones, que continúan, han revelado que el solar siempre estuvo destinado a una finalidad religiosa. Hay restos romanos, visigóticos e islámicos. Los arqueólogos también han descubierto que el templo estaba construido fuera de la muralla de la ciudad y afirman que la torre es una construcción cristiana, por lo tanto nunca perteneció como alminar a una antigua mezquita de la que no se han hallado restos. "Por ahora todos nos dice que no la torre no es musulmana. Se construye con la iglesia fernandina". En la cripta se realizará también un columbario.

Cripta arqueológica que se podrá visitar.
Cripta arqueológica que se podrá visitar. / Belén Vargas
Cámara de ventilación que se están construyendo en el exterior.
Cámara de ventilación que se están construyendo en el exterior. / Belén Vargas

En el interior del templo también han salido a la luz unos restos de decoración pictórica "muy interesantes", según el arquitecto, que se hallan en la puerta norte del templo, por donde salen los pasos. Esta puerta, por cierto, contaba en su origen con otro arco de herradura que fue destruido para permitir la salida de los pasos. Los restos son muy visibles.

Los trabajos se trasladarán durante las próximas semanas al perímetro exterior del templo para construir la cámara bufa que elimine la humedad, uno de los grandes problemas del templo. "Por mi experiencia es la mejor solución". Por último se sustituirán los pináculos en mal estado o los merlones de la torre que son de mala factura.

stats