Hay reserva de agua para tres años pese a la falta de lluvias en la cuenca del Guadalquivir
La situación de los embalses del Guadalquivir
El año hidrológico 2018-2019 ha sido “más seco de lo normal” con precipitaciones un 24% inferiores a la media anual de los últimos 25 años
La cuenca está en situación de prealerta, con seis zonas en alerta entre las que destaca el Guadiamar
Sevilla/A pesar de la falta de lluvias que hemos padecido en el año hidrológico 2018-2019 que acaba de concluir, las reservas de agua embalsada garantizan el abastecimiento para tres años en toda la cuenca del Guadalquivir.
Según la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), desde el 1 de octubre, fecha en la que comenzó el nuevo año hidrológico 2019-2020, la reserva hidráulica alcanza los 2.880 hectómetros cúbicos almacenados, lo que supone que los embalses están al 35,5% de su capacidad total. Y con esas reservas podemos tenemos agua para los próximos tres años, dice el organismo estatal.
Esta cifra supone 788 hectómetros cúbicos menos (10% de la capacidad actual de embalse) que el volumen medio embalsado en esta fecha durante los 25 años anteriores.
En el periodo anual que ha pasado, la media de lluvias en la cuenca del Guadalquivir ha sido de 451 litros por metro cuadrado, un 24% inferior a la media anual de los últimos 25 años, que se sitúa en 597 litros por metro cuadrado. Esto significa que sehan almacenado 146 litros menos por metro cuadrado que en la media de los últimos 25 años.
Según el Informe elaborado por la CHG, organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, el año hidrológico 2018-2019 que finalizó el pasado 30 de septiembre ha sido “más seco de lo normal”.
En relación a las aportaciones a los embalses, las precipitaciones registradas en los últimos doce meses han generado unas aportaciones a los embalses de 1.215 hectómetros cúbicos, lo que supone una disminución del 68% respecto a la aportación media de los últimos 25 años.
Salvo octubre, noviembre, abril y septiembre, en los que las precipitaciones fueron superiores a las normales, en los ocho meses restantes se han registrado valores “sensiblemente inferiores a sus medias históricas”.
Desde el punto de vista de la distribución espacial, las zonas que han recibido las mayores aportaciones de lluvias han sido la cabecera del río Guadalquivir y el sur de la provincia de Jaén, si bien, con carácter general, ninguna provincia ha alcanzado la pluviometría media si se atiende a la precipitación recibida en el conjunto de los embalses.
Prealerta
A fecha de 1 de octubre, la cuenca está en una situación general de “prealerta” si atendemos al “estado de escasez” en la demarcación del Guadalquivir, es decir, a la disponibilidad del recurso del agua para cubrir las demandas. Pero hay algunas zonas que están directamente en estado de “alerta”, entre las que sobresale el Guadiamar (Sevilla), la zona de regulación general (el sistema más grande y el que abarca más cuenca; de él se surte la mayor parte del regadío del Guadalquivir), Dañador (Jaén), Sierra Boyera (Córdoba), Guardal (Granada) y Guadalmellato (Córdoba). Los detalles pueden verse en el mapa de la infografía adjunta.
Guadiamar
El Guadiamar está en situación de “alerta” (indicador de alerta 0,124) porque está a un 36,73% de llenado respecto del máximo nivel que ha tenido en hectómetros cúbicos, según el informe de estado de la escasez a 1 de octubre de 2019 que puede verse en la web de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
Regadío
Otra zona que está en “alerta” es la Regulación General, es decir, el sistema más grande y el que abarca más cuenca. Y del que se surte la mayor parte del regadío de la cuenca. Está a un 29,91% de llenado respecto al máximo que puede alcanzar. Su indicador de alerta es de 0,267. Otras zonas en alerta son Dañador, Sierra Boyera, Guardal y Guadalmellato.
En lo tocante al “estado de sequía” en cada territorio de la cuenca, esto es, a los datos meteorológicos respecto a la media histórica, el informe de la Confederación a fecha de 1 de octubre de 2019 revela que la situación general es de “ausencia” de sequía prolongada. Pero hay zonas que sí están muy afectadas y sufren una situación de “sequía prolongada”: Rivera de Huesna y Viar, Rivera de Huelva, Guadalquivir entre Marmolejo y Córdoba (Guadalmellato), Guadalmellato y Guadiato, Guadalquivir entre Córdoba (Guadalmellato) y Palma, Bembézar, Retortillo, Guadalora y Guadalbacar. Los datos están disponibles en la web de la Confederación (www.chguadalquivir.es) y se renuevan periódicamente.
Para evitar inundaciones cuando las lluvias aprieten hay que limpiar los cauces. El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, visitó ayer los trabajos de limpieza y acondicionamiento que la Confederación ha desarrollado en el río Guadaira que transcurre junto a la urbanización de La Ramira y en el arroyo del Cuerno, a su paso por el Cordel del Alcoba o Cabriza.
El plan cuenta con una inversión de 5,2 millones y beneficia a 50 municipios de la provincia. Le acompañaban el comisario adjunto de Aguas de la CHG, Juan Lluch; el alcalde de Morón de la Frontera, Juan Manuel Rodríguez Domínguez; y el responsables del Grupo Tragsa, que ejecuta las obras.
Temas relacionados
1 Comentario