El regreso de la enfermedad mano, pie y boca pone en alerta a los padres

Tras dos años con una baja incidencia, el virus del mano, pie y boca regresa con fuerza a las guarderías y colegios. Esta enfermedad es, actualmente, el principal motivo de consulta en Pediatría, junto con las bronquiolitis en los lactantes. Pero los profesionales advierten: "No estamos ante un brote epidémico". Y piden tranquilidad a los padres.

Guarderías de Sevilla han identificado en sus aulas numerosos casos de esta enfermedad, propia del otoño, y piden a los padres extremar las preocupaciones, intensificar las medidas de higiene y dejar a los menores en casa en el caso de que aparezca algún síntoma, algo que ha generado cierta alarma entre los progenitores.

Macarena Muñoz Ramos, pediatra y directora del centro de salud Virgen de África, asegura que no estamos ante ningún "brote epidémico". "Es cierto que estamos viendo muchos casos de esta enfermedad. En las últimas dos semanas, esta enfermedad es el principal motivo de consulta junto con las bronquiolitis en los lactantes, pero entra dentro de lo normal. Lo que ocurre es que, en los últimos dos años, hemos estado más aislados a causa de la pandemia del Covid-19, de ahí que este año estemos viendo más casos que el año pasado. Parece que nos hemos olvidados de muchas enfermedades infantiles en estos dos años, ésta entre ellas. Esto no es la nueva normalidad, es la normalidad", señala la pediatra.

"Un brote es un aumento inusual de casos de una enfermedad más allá de lo normal y éste no es el caso. Es verdad que estamos teniendo muchos casos, pero los habituales en esta época del año. Éste es un virus que vemos, especialmente, a final del verano y durante el otoño, Lo raro sería ver esta alta incidencia, por ejemplo, en enero. Ahorma mismo, es lo esperado", añade la pediatra sevillana Victoria Molina.

Desde la Consejería de Salud y Consumo niegan también que estemos ante un brote. Al no ser una enfermedad obligada a declarar, no existen estadísticas oficiales de la incidencia. La última vez que se registró en Sevilla un aumento inusual de casos de esta enfermedad fue en 2018, cuando se registraron tres brotes distintos en el mismo año.

La enfermedad mano, pie y boca está causada por virus que pertenecen a la familia de los enterovirus. El más habitual es el virus Coxsackie A16. Afecta, sobre todo, a niños entre 2 y 10 años, aunque es especialmente común en menores que van a la guardería, según explica la doctora Macarena Muñoz. También puede afectar a los adultos, pero en menor medida. En este caso, la enfermedad puede llegar a ser más virulenta, tal como ocurre con otras enfermedades infantiles en adultos, como el sarampión.

Como la inmensa mayoría de las infecciones infantiles, el mano, pie y boca se contagia a través de las secreciones, como la saliva de otro niño enfermo (al hablar, toser, besar y achuchar), a través de las manos, juguetes o utensilios que hayan estado en contacto con el paciente y tras la manipulación de las heces, ya que el virus se excreta vía digestiva y a través de la saliva.

Una vez pasa el periodo de incubación, que puede durar entre 3 y 6 días, aparecen los primeros síntomas. "Es muy frecuente que un niño contagie la enfermedad durante el periodo de incubación de la enfermedad porque, posiblemente, los padres ni sepan que el menor tiene la infección. Por eso es tan fácil que se propague el virus. A esto hay que sumar el cambio de estación, la vuelta al cole y que los colegios y las guarderías son espacios cerrados con una ventilación, a veces, insuficiente", apunta la doctora Victoria Molina.

Los principales síntomas son fiebre, dolor de garganta, mocos o goteo nasal, como en cualquier resfriado común y, a posteriori pueden aparecer en la boca unas lesiones pequeñas o ampollas (en la parte posterior de la garganta, la parte superior de la boca, a ambos lados de la lengua y en la encía, y a veces alrededor de los labios). También pueden aparecer en los dedos, en las palmas de las manos y en las plantas de los pies unas lesiones puntiformes. En algunos niños con pieles atópicas o con pañales, también pueden aparecer estas lesiones en las nalgas. Estas ampollas, especialmente la de las bocas, pueden doler si se ulceran.

Mano, pie y boca VS exentema súbito

Es importante no confundir la enfermedad mano, pie y boca con el exentema súbito. Ambas son enfermedades causadas por un virus y no tienen un diagnóstico clínico. En el caso del exentema súbito, suele afectar, principalmente, a niños entre los 3 meses de edad y los 2 años.

Primero, suele aparecer fiebre sin foco durante dos o tres días. A continuación, desaparece la fiebre y aparece una erupción en la piel del tronco, cuello y espalda con unas manchitas sonrosadas pequeñas. La principal diferencia con el mano, pie y boca es que, en el caso del exentema súbito, las erupciones son generalizadas, no están localizadas, y no suele picar, ni molesta y si se estira la piel con dos dedos, las manchitas clarean. El exentema suele desaparecer entre las 24 y las 48 horas.

"Pedimos a los padres tranquilidad, que no se alarmen ni se angustien", exclama la doctora Macarena Muñoz. "La enfermedad mano, pie y boca es tan común en las guarderías como los mocos, que aparecen en septiembre y no se van hasta mayo".