Un rebaño de cabras mantiene de forma ecológica las praderas del Parque San Jerónimo de Sevilla
Impulsado por Ecologistas en Acción desde 2005, este proyecto integra prácticas de ganadería ecológica que eliminan el uso de productos químicos y fomentan la alimentación natural de los animales
Renovación de los caminos del Parque de San Jerónimo en Sevilla
El Parque San Jerónimo de Sevilla se ha convertido en un referente de sostenibilidad gracias al programa Biosegadoras, una iniciativa que utiliza cabras para gestionar de forma ecológica el mantenimiento de la vegetación en sus praderas. Impulsado por Ecologistas en Acción desde 2005, este proyecto integra prácticas de ganadería ecológica que eliminan el uso de productos químicos y fomentan la alimentación natural de los animales.
El programa Biosegadoras cuenta con un rebaño de 25 cabras, que permanecen en un área específica del Centro de Ecología Social Germinal (C.E.S.) como explotación ganadera reconocida. A diario, los animales son trasladados a una zona de estancia diurna del parque donde se alimentan con restos de poda de árboles y arbustos. El traslado, de aproximadamente 300 metros por el interior del parque, se realiza siguiendo una ruta de ecopastoreo, bajo la supervisión de personal especializado.
Esta iniciativa no solo involucra a las cabras, sino también a la comunidad. Barriadas como Almer, Huerta de la Papachina, RENFE II y Juan XIII contribuyen al programa suministrando restos de alimentos y podas, mientras que el Ayuntamiento de Sevilla, a través de la empresa CORALSUR, facilita restos de poda del parque. Además, personas voluntarias, tanto de Sevilla como de diversas procedencias por prácticas internacionales, colaboran con el cuidado y manejo del rebaño.
Beneficios ambientales y sociales
El uso de cabras para el mantenimiento del parque aporta múltiples ventajas:
- Reducción de combustibles fósiles: Se eliminan las emisiones asociadas a desbrozadoras y cortacéspedes.
- Gestión de residuos: Las cabras consumen restos de poda, reduciendo la cantidad que termina en vertederos.
- Sostenibilidad ambiental: Se disminuye el uso de pesticidas y se fomenta la biodiversidad.
- Mejora del suelo: El estiércol generado en las áreas de descanso es utilizado como abono en los huertos sociales y el que dejan a su paso abonan las praderas dónde pastan evitando la necesidad de agroquímicos.
- Menor contaminación acústica: Se evita el ruido de equipos motorizados.
- Fomento de la educación ambiental: La presencia de cabras enriquece la experiencia de los visitantes y promueve la concienciación sobre prácticas ecológicas.
Un espacio vivo y educativo
El Parque San Jerónimo no solo es un lugar de recreo, sino también un ejemplo de gestión respetuosa de áreas verdes. Iniciativas como Biosegadoras convierten el parque en un espacio dinámico que equilibra el cuidado ambiental y el disfrute ciudadano.
Para garantizar la convivencia entre visitantes y cabras, se recomienda seguir ciertas pautas como, evitar alimentarlas, mantener una distancia prudente, respetar el entorno, mantener atadas a las mascotas y supervisar a la infancia.
Además, como parte de la promoción de esta innovadora iniciativa, el programa Biosegadoras presenta un vídeo exclusivo que muestra cómo las cabras desempeñan su papel de jardineras naturales. Este material permite a los espectadores conocer de cerca el impacto positivo del proyecto en el parque y en la comunidad. Ecologistas busca inspirar a otras ciudades a implementar soluciones similares.
Este programa destaca como un modelo de integración de la agroecología en entornos urbanos, generando beneficios para el medio ambiente y fortaleciendo los lazos comunitarios. La ciudadanía está invitada a descubrir esta innovadora propuesta en el Parque San Jerónimo.
Temas relacionados
No hay comentarios