Los 69 puntos negros de la provincia

Las carreteras de la provincia de Sevilla cuentan con 69 puntos negros, la mayoría de ellos en el área metropolitana de la capital y más de un tercio en la autovía de circunvalación SE-30. Así lo reconoce el Gobierno en una respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el diputado de IU por Sevilla, José Luis Centella. En esa misma respuesta se adjuntan también los datos de 2010, que se cerró con 73 puntos negros, cuatro más que el año pasado.

Con el término punto negro la Dirección General de Tráfico denomina a aquellos tramos de carretera en los que se hayan registrado al menos tres accidentes con víctimas -mortales o heridos- a lo largo de un año natural. Así, es lógico que la mayoría de estas zonas conflictivas se concentren en los alrededores de la capital, cuyas carreteras soportan más tráfico que el resto.

La SE-30 es la vía más peligrosa de Sevilla, con 24 puntos negros. Uno de cada tres tramos de riesgo de la provincia están en esta autovía de circunvalación, que tiene apenas 23 kilómetros de longitud. Es decir, hay más zonas peligrosas que kilómetros. El tramo más conflictivo es el puente del V Centenario y su entorno, donde se concentran cinco puntos negros que se han mantenido tanto en 2010 como en 2011. Otro tramo de riesgo es el nudo de la Gota de Leche, si bien prácticamente en cada kilómetro de la SE-30 hay algún punto negro.

El diputado de IU por Sevilla recuerda que la concentración de accidentes en torno al puente del V Centenario demuestra que "no se han tomado medidas para resolver" el problema. "También es preocupante que los puntos se desplacen unos metros de un año a otro, lo que indica que el problema no se encuentra en un punto kilométrico concreto, sino que estamos ante una situación conflictiva de toda una zona, ya que en la SE-30 se producen accidentes en prácticamente todos los kilómetros", expuso José Luis Centella en un comunicado.

Destaca como segunda carretera afectada por la siniestralidad la A-8058, conocida popularmente como autovía de Coria del Río, que une Sevilla con el municipio ribereño y con la localidad vecina de La Puebla. En el tramo entre Sevilla y Coria hay cinco rotondas y dos cruces con semáforo, mientras que en la circunvalación de Coria que conduce a La Puebla hay cuatro glorietas más. La carretera, que tiene sólo 12 kilómetros, cuenta con ocho puntos negros, uno de ellos en la incorporación desde la SE-30 y varios al paso por San Juan de Aznalfarache y Gelves. Como recuerda el representante de IU en el Congreso, en un tramo de 12 kilómetros se registraron el año pasado 28 accidentes con víctimas.

La tercera carretera más peligrosa de la provincia es la SE-20, que conecta la autovía de Madrid, la A-4, desde el aeropuerto de San Pablo con la Isla de la Cartuja y la ronda supernorte. En esta vía, de apenas diez kilómetros de longitud, se concentran seis puntos negros.

El cuarto puesto lo comparten, con cinco puntos negros cada una, la autovía de Granada, la A-92, y la de Huelva, la A-49, que ha pasado de tener ocho tramos conflictivos en el año 2010 a cinco en el 2011. En el caso de la A-92, cuatro de las zonas de riesgo están situadas en los tres kilómetros más próximos a la capital andaluza, la salida por Torreblanca y Alcalá de Guadaíra. En la autovía de Huelva, los cinco puntos negros se concentran en los diez kilómetros de entrada y salida a Sevilla. Ayer precisamente en esta carretera se produjo un accidente grave en el que hubo que cortar parcialmente el tráfico para poder despejar la vía, ya que se vieron implicados dos camiones y un taxi.

También llama la atención que la carretera de Utrera, la A-376, acumule cuatro puntos negros, tres de los cuales están en la salida por Montequinto y uno a la llegada a Utrera. Sorprende, por otra parte, que la N-IV, la carretera que registró una de las peores rachas de accidentes de la historia reciente el pasado verano, sólo tenga dos puntos negros.

Para José Luis Centella, la concentración de tramos de accidentes en zonas urbanas o del área metropolitana, "indica por una parte la necesidad de actuar en mejorar las vías existentes y por otra parte en la necesidad de disminuir la afluencia de vehículos mediante la potenciación del transporte público y de una red ferroviaria de cercanías". El representante de IU espera que los recortes anunciados por el Gobierno no paralicen el desdoble de la N-IV ni reduzcan las patrullas de la Guardia Civil.