La mitad del puente de Triana se corta a diario casi cinco horas a peatones y ciclistas por el mapping del río

El espectáculo navideño de luces que se proyecta sobre la zapata de la calle Betis se está llevando a cabo con el corte parcial del puente de Triana para peatones y bicis durante las casi cinco horas que duran las seis sesiones diarias (18:45, 19:30, 20:15, 21:00, 21:45 y 22:15 horas). Decenas de vallas impiden que se vea el mapping desde la acera del puente más próxima al Muelle de la Sal. Autobuses y coches sí pueden pasar por el puente.

A diario, entre las 18: 15 de la tarde y las 23:00 no hay modo de cruzar ni a pie ni en bici por este lado del puente de Triana. Desde esas horas, varios agentes de Policía Local hacen guardia para que nadie pase a esta mitad del paso superior. Quien quiera ver el espectáculo tiene que sentarse en las gradas del muelle pagando un euro.

Durante estas horas el puente se convierte en un verdadero embudo para los peatones, obligados a cruzar solo por la acera más próxima al Paseo de la O. La multitud de peatones que se agolpa en tan poco espacio hace imposible abrise paso y caminar. Para el tráfico motorizado de autobuses y coches, sin embargo, no hay limitación alguna para cruzar por este paso trianero. Llama la atención este hecho teniendo en cuenta que los peatones, por norma, deben tener prioridad de paso frente al resto de modos de transporte.

"¡Cruce por la otra acera, por favor!" es la advertencia constante de los policías locales a los cientos de ciudadanos que inundan el acceso al puente desde el Paseo de Colón y desde el Altozano.

Seis agentes como mínimo vigilan que nadie cruce a la acera y al carril bici que da a la zapata de la calle Betis. Y una estructura de vallas alineadas bloquea el paso a la barandilla hasta la mitad de la estructura elevada, pese a que el primer año que se publicitó este espectáculo (Navigalia) se dijo que se podría ver desde el puente de Triana.

Desde el Ayuntamiento de Sevilla, el gobierno de José Luis Sanz responde que este corte del puente se debe a razones de "seguridad". Los agentes que controlan el paso también responden que es por seguridad vial. Pero la realidad es que en la otra acera del puente la aglomeración de personas se hace imposible y genera situaciones de inseguridad vial. En la acera y el carril bici se agolpan los que se quedan parados para ver el espectáculo y los que tratan de caminar abriéndose paso entre la multitud.

La desinformación es muy elevada sobre los accesos para llegar al Muelle donde ver este espectáculo y sobre la compra de entradas. Uno de ellos es José Manuel Fuentes, vecino de Sevilla residente en Villanueva de los Castillejos (Andévalo, Huelva), que disfruta de su jubilación tras 30 años en una empresa de seguridad, quien lamenta que se ha quedado este lunes con las ganas de ver el mapping. Le han dicho que tiene que comprar las entradas por internet pagando un euro para acceder a las gradas del Muelle de la Sal, pero no tiene internet y no hay taquilla en la zona. Hay decenas de afectados como José Manuel.

sss