Los profesionales del Virgen del Rocío aprenden cómo actuar ante comportamientos violentos

El Hospital Universitario Virgen del Rocío y la Policía Nacional han organizado un taller presencial dirigido a profesionales con el objetivo de facilitarles herramientas y pautas sobre cómo actuar ante comportamientos violentos de los usuarios y pacientes, para así evitar agresiones o minimizar sus consecuencias. Se trata de una actividad coordinada por la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales en consonancia con el Plan de Agresiones del Servicio Andaluz de Salud.

Más de 170 profesionales han acudido a la cita, que ha estado presidida por la directora de Personal, María Ángeles Pérez Tapia; el jefe de la unidad de Prevención de Riesgos Laborales del hospital, Salvador Jiménez; y el inspector de Policía Fernando García.

El programa ha incluido información sobre la Instrucción 3/2017 sobre medidas policiales frente a agresiones a los profesionales de salud; el protocolo de actuación ante agresiones que siguen los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado; la regulación agresiones a funcionarios sanitarios Art. 550.1 del Código Penal; y algunas técnicas de contención verbal del agresor y medidas de seguridad, por ser estas las agresiones más frecuentes.

Esta actividad se enmarca en la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales determina un adecuado nivel de protección de la salud de los trabajadores frente a los riesgos derivados de las condiciones de trabajo. Y por otro lado, en el Plan de Prevención y Atención frente a agresiones para profesionales del Sistema de Salud público de Andalucía (SSPA), que contempla como medidas preventivas para la capacitación y competencias de los trabajadores, la formación específica para potenciar la prevención de agresiones.

De hecho, el Plan de Prevención y Atención de agresiones para los profesionales del sistema sanitario público andaluz recoge la puesta en marcha de la aplicación para móviles Alertcops, que permite la geolocalización en las asistencias sanitarias a domicilio y la comunicación con los cuerpos policiales.

Asimismo, ofrece un programa especial de acompañamiento al profesional agredido y un profesional con formación específica que ejercerá como guía en la prevención de agresiones y actuación ante las mismas. También prevé la instalación de medidas de seguridad en áreas sensibles (cámaras de videovigilancia, timbres avisadores o vigilantes de seguridad), y planes específicos de formación y atención asistencial, jurídica y psicológica del profesional.