Un parque en la plaza de las Setas

Nadie puede poner en duda que las Setas de la Encarnación se han convertido en uno de los iconos de Sevilla. Un punto de encuentro social y habitual del paisaje urbano en las múltiples fotos (especialmente los selfies que tan de moda están) que se cuelgan en las redes sociales. En los últimos años, ha ganado una importante cuota entre los monumentos más buscados por los turistas cuando llegan a la capital andaluza. Un poder de atracción que ni el Ayuntamiento hispalense ni su concesionaria, Sacyr, quieren dejar en punto muerto, sino todo lo contrario, potenciarlo y adaptarlo a la demanda.

El siguiente paso será el acondicionamiento de la plaza, en lo que ya se trabaja en los últimos días. Fuentes de Sacyr apuntan que el objetivo de la intervención es transformarla en un espacio amable y contemporáneo, que responda tanto a las necesidades de los vecinos como a las de los turistas. Para ello se propone una intervención integral en toda la plaza que abarca tres niveles.

En primer lugar, la incorporación de la naturaleza como ingrediente vertebrador de una nueva identidad, “algo cada vez más necesario en las grandes ciudades”. Por otro lado, un plan estratégico de mobiliario urbano, acorde al contexto emblemático, que aporte zonas de descanso y favorezca la socialización, “transformando la plaza en un lugar para estar, no solo una zona de paso”. Por último, la incorporación de áreas de juegos infantiles que se integren con la singular arquitectura de la plaza.

El proyecto de paisajismo se aborda desde un doble enfoque. Por un lado, se plantea una intervención en los sinuosos parterres del perímetro, inspirada en el bosque de ribera, cuyo objetivo es crear un telón de fondo continuo y permeable que envuelva el espacio. Por otro lado, en la zona central se ha planteado un “paisaje móvil” que pueda adaptarse a las diferentes situaciones que se viven en esta plaza. En este caso, inspirado en los ecosistemas naturales de la dehesa andaluza, donde los olivos y el romero son los protagonistas.

Se busca una plaza adaptable que logre un equilibrio entre el uso local, el turismo, y las grandes celebraciones multitudinarias de la ciudad. Para conseguir este triple objetivo se ha diseñado un sistema de bancos-maceta móviles que en función de su disposición en la plaza generen diferentes paisajes, creando las condiciones espaciales óptimas para responder a todo tipo de necesidades. El propio uso del espacio a lo largo del tiempo irá ayudando a identificar qué disposiciones de estos dispositivos móviles son los más eficientes, y al contrario de los espacios urbanos, donde mobiliario y vegetación tienen una posición fija, responder en tiempo real a demandas ciudadanas imprevistas.

El estudio Smart and Green Design expone que la arquitectura y materialidad de las setas ha sido el referente a la hora de diseñar las diferentes tipologías de mobiliario propuesto. El material utilizado para su construcción es una respuesta a la retícula constructiva que da forma a las Setas, utilizado tanto para los bancos móviles como para el mobiliario que se ha diseñado alrededor de los parasoles.