El paro cuesta ya hasta 500 euros a algunos empleados

Cien euros brutos al día, aproximadamente. Ésta es la cantidad que está dejando de percibir la media de empleados de Lipasam desde que se inició la huelga de basura, según los cálculos realizados por la propia empresa. Una vez que el conflicto se ha enconado la duda es cuántos días más de paro podrán soportar los trabajadores en la actual situación económica.

Fuentes del comité de empresa aseguraron ayer que el ánimo de la plantilla está alto y que los empleados están dispuestos a seguir dando la batalla para defender sus intereses. No obstante, la huelga pasará factura pronto y eso es algo que también barajan los sindicatos. El apoyo ciudadano a este colectivo de trabajadores tampoco es alto, una vez que han trascendido a la opinión pública los salarios y condiciones del convenio de Lipasam. Trabajar en esta empresa asegura unos ingresos mínimos de 25.000 euros anuales, con múltiples opciones de aumento por diversos pluses. Por ejemplo, el salario base sube hasta un 70% por antigüedad. Y sólo por no faltar al trabajo, el empleado cobra un incentivo de 1.400 euros al año. La nómina más alta de la empresa es de 39.129 euros.

El gobierno local mantiene que estos trabajadores deben adaptar sus salarios a las condiciones fijadas en el Ayuntamiento de Sevilla por la actual situación de crisis. Y recuerda que aceptar sus reivindicaciones supondría un agravio comparativo, por ejemplo, con los trabajadores de Tussam, otra empresa municipal.

El delegado de Urbanismo y Medio Ambiente, Maximiliano Vílchez, exigió ayer de nuevo un ejercicio de responsabilidad al comité de empresa, a quien recordó que el 2 de abril de 2012 aceptó unas condiciones, que se votaron en asamblea, y que deben acatarse ahora. "Aquí está el documento con muchas firmas de trabajadores que lo avalan", reiteró Vílchez.

Los representantes del comité de empresa advirtieron ayer que la huelga perjudica no sólo al empleado, sino a los sevillanos en general, y por ello siguen sin entender la firmeza con la que el Ayuntamiento de Sevilla está afrontando el conflicto.