El palacio de Don Fadrique sale a la luz

Unos restos que merece la pena recuperar y que puedan ser admirados. La restauración del convento de Santa Clara ha sacado a la luz antiguas estructuras de gran valor patrimonial. Una de ellas corresponde a los restos del Palacio de Don Fadrique. La aparición de estos restos arqueológicos ha deparado que se haya tenido que hacer una modificación del proyecto de obras para rehabilitar este espacio singular y toda la ornamentación hallada, como unas muy interesantes yeserías. La modificación prevista tiene un coste de 67.647 euros y sólo falta el visto bueno de la comisión de Patrimonio para que arranque. El plazo de ejecución será inferior a los dos meses.

Los retos hallados del Palacio de Don Fadrique están datados en la segunda mitad del siglo XIII, por lo que sería el edificio de carácter civil más antiguo conservado en pie en la ciudad. Precisamente, uno de los objetivos del proyecto es la recuperación de la volumetría interior y exterior de la qubba sur(término árabe que designa una estructura arquitectónica con base cuadrada y cúpula o techo de madera no plano) del antiguo palacio del infante, de cuya existencia quedó constancia en las anteriores campañas de la investigación arqueológica llevada a cabo por Pablo Oliva Muñoz bajo la dirección del profesor de la Hispalense Miguel Ángel Tabales.

Durante los trabajos de demolición se procedió al desmontaje de diversos elementos que se encontraban en mal estado, como una escalera que desde el claustro bajo daba acceso a la primera planta de la crujía suroeste. El proyecto inicial preveía la conservación de esta escalera como vestigio del antiguo uso conventual del edificio, pero una vez desmontada, como señala el informe, "se ha podido visualizar la que fue la sala previa al acceso a la qubba sur de la antigua construcción palatina".

Además, se ha recuperado la dimensión original de acceso a la torre e incluso la ornamentación superior, consistente en unas yeserías talladas con caracteres árabes que, al parecer, reproducen un poemilla piadoso. En la parte superior de esta portada se han encontrado tres pequeñas ventanas que se intercalan con paños de yeserías rectangulares. También es perceptible, en estos momentos, la espacialidad original de la antigua antesala de la qubba, "de la que se pueden apreciar gran parte de los paramentos que la conformaban delimitados, en la zona superior, por frisos de yeserías y cornisas que también se conservan".

La modificación del proyecto para conservar estos espacios supondrá la eliminación del forjado de planta primera y de la antigua escalera por la que se accedía al mismo.

Según el informe técnico, "la recuperación de lo que parece ser el salón meridional y la qubba principal, situada en el eje norte-sur del palacio de Don Fadrique, incrementa el valor patrimonial del conjunto al evidenciar la singular evolución histórica del mismo, mostrando, además, elementos de una gran importancia artística y arquitectónica, como son las yeserías y motivos ornamentales mudéjares que decoraban estas estancias".

Los técnicos proponen unos nuevos accesos y zonas de paso en esta zona, "con los que se resuelve el aspecto funcional y de accesibilidad a la vez que se ponen en valor los restos medievales que enriquecerán aún más la visita al conjunto edilicio, contribuyendo, además, a la lectura de la evolución histórica y arquitectónica del mismo".