Cómo pagar la mitad en el billete de tren

Desde ayer, Renfe pone a disposición de los usuarios 10.000 plazas diarias de trenes AVE y Larga Distancia en todo el territorio nacional a mitad de precio que hasta ahora siempre que se reserven con suficiente antelación y por internet. Por contra, los billetes no admiten cambios y únicamente es posible anularlos con un gasto que oscila entre el 30 por ciento y el 50 por ciento del precio de compra.

De las cinco nuevas tarifas que han entrado en vigor, la más ventajosa, la denominada Web, es la única que ofrece al usuario un descuento de hasta el 60 por ciento si la compra se hace por internet con un mínimo de 15 días antes de viajar, si es clase turista o litera y si quedan plazas disponibles. Con esta rebaja un billete de Madrid a Sevilla se queda en 28,9 euros frente a los 72,2 euros que costaba hasta ahora. En este caso, la anulación supone un gasto equivalente al 50 por ciento del precio del billete.

Renfe asegura que distribuirá a diario las 10.000 plazas de promoción de que puede disponer en función de los días y las horas que más le convengan, lo que significa que habrá más trenes a bajo precio en las horas y días considerados valle, es decir, fuera de las horas punta. El cliente que más anticipe la compra será el que más podrá beneficiarse de una de estas plazas. La compañía calcula que estas tarifas permitirán elevar la cifra de viajeros en 1,5 millones más anuales.

La tarifa Estrella, la segunda más ventajosa, ofrece descuentos del 40 por ciento si el billete se compra con menos antelación (siete días antes del viaje). En este caso, es posible reservarlo en estaciones y agencias de viaje, aunque también admite que se haga por internet. Esta tarifa admite cambios, pero los penaliza. Si se realizan con un mínimo de siete días antes del viaje el gasto oscilará entre el 15 por ciento y el 20 por ciento del precio del billete. Fuera de este periodo sólo se admite la anulación del billete a cambio de pagar un 30 por ciento del precio del billete.

La tercera tarifa nueva se denomina Puente AVE y consiste en un billete abierto durante un año a partir de la fecha de compra y en los trayectos que admitan esta opción. Sólo se aplicará a partir de la tercera semana de diciembre, ya que antes deben instalarse las máquinas de confirmación de reservas necesarias para formalizar el billete. En este caso no se exige comprar con antelación y se supone que tampoco se penalizan los cambios ni las anulaciones si se hacen "antes de un año desde la fecha de compra".

Las demás tarifas son la "ida y vuelta", con un descuento del 20 por ciento para asegurar el regreso; y la general, que no admite descuento e implica la posibilidad de reservar plaza.

Las organizaciones de consumidores UCE y Facua mostraron ayer su temor a que las nuevas tarifas de AVE de Renfe tengan los mismos aspectos negativos para el usuario que las tarifas bajas de avión. "Los consumidores se pueden encontrar con algo parecido a lo que existe en el sector aéreo, donde un día el billete cuesta una cantidad y al día siguiente aumenta de forma desproporcionada", indicaron.

Por ello, las dos organizaciones solicitan un sistema de tarificación del AVE "claro, nítido y transparente, con precios establecidos por categorías, en función de las prestaciones que se ofrezcan", ya que, de lo contrario "se entrará en un terreno farragoso propiciado por la total desinformación". En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Unión de Consumidores de Andalucía (UCE-Andalucía), Juan Moreno, advirtió del riesgo de jugar al bajo coste "en un servicio público como el ferrocarril, que se debe preservar un desarrollo más competitivo".

Facua considera "positivos" los descuentos en determinados trayectos y fechas, aunque sería negativo si Renfe no informa claramente de las tarifas. Considera "abusivo y sin justificación" que la compra por internet sea más barata, ya que discrimina al que no tenga internet o no quiera pagar con tarjeta de crédito.