La oposición considera escandalosa la "privatización" del espacio público

Los dos grupos de la oposición, PSOE e Izquierda Unida, votaron este lunes en contra de la cesión demanial de los Baños de la Reina Mora a la Hermandad de la Vera Cruz, que se aprobó ayer en el consejo de administración del Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS).

Los socialistas denunciaron la "privatización" de este espacio público en el que el Ayuntamiento ha invertido, entre el coste de la expropiación culminada hace nueve meses y las obras de rehabilitación ya ejecutadas, más de 1,3 millones de euros. Un espacio cultural que, además, está declarado Bien de Interés Cultural (BIC), por lo que Izquierda Unida calificó de "barbaridad y escándalo" el convenio de colaboración alcanzado con la hermandad. La concesión se firma por 25 años, prorrogables a otros 50, plazo en el que los restos almohades serán de uso privativo.

El PSOE cuestionó este lunes la legalidad de esta operación, a la que se opuso por una máxima: el convenio subvierte el objeto de la expropiación. Los Baños de la Reina Mora fueron expropiados finalmente en 2014 después de que los propietarios, una intercomunidad de vecinos de un edificio anexo y la propia hermandad, aceptasen el justiprecio fijado por el Ayuntamiento que ascendió a un total de 380.474 euros. Un proceso que se inició por la necesidad de acometer obras de rehabilitación en el inmueble que los dueños se negaban a asumir. Por ello, resulta paradójico que este BIC se ceda ahora a los mismos propietarios.

"Después de haber hecho una expropiación con dinero público, no cabe otra opción que incorporar los baños a la oferta turística y cultural como un recurso público más", apuntó Antonio Muñoz, portavoz adjunto del PSOE, que apostó por invertir los roles y hacer que el Ayuntamiento mantenga el papel primordial y la hermandad juegue un papel complementario. En otras palabras, que el gobierno local autorizase a la Vera Cruz el uso de los baños, sin necesidad de cederlos. Los socialistas insistieron en que su oposición no tiene nada que ver con la naturaleza de la entidad beneficiaria, sino con la incapacidad del ICAS de hacerse cargo de este espacio.

Izquierda Unida se opuso "rotundamente a que una joya arquitectónica de la cultura almohade acabe en manos privadas", cuando en el verano de 2014 la parcela fue expropiada y pagada a la hermandad a la que ahora se le cede el recinto. Es cuando menos paradójico para Josefa Medrano, portavoz de IU.

El ICAS alega que podrá usar el inmueble

La delegada de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, María del Mar Sánchez Estrella, argumentó este lunes en defensa de la cesión de los Baños de la Reina Mora que la hermandad beneficiaria es una entidad sin ánimo de lucro y que el Ayuntamiento tendrá derecho a usar la sala hasta 180 días al año para su programación que, según se recoge en el convenio, deberá ser consensuada con la cofradía. La edil insistió en que el ICAS hará inspecciones para velar por el cumplimiento del contrato y destacó que los gastos de mantenimiento y conservación correrán ahora a cargo de la hermandad, que acometerá obras para adecentar y mejorar la estética del espacio. Sánchez Estrella criticó que la oposición no se escandalizara cuando realizaron la concesión demanial del Pabellón de los EEUU de la Expo del 29, por ejemplo. Y, como salida, apuntó a IU recordando que escándalos son los de Mercasevilla y la Fundación DeSevilla, con dos ex concejales imputados.