La aldaba
Carlos Navarro Antolín
¿Se imaginan un Aldama en versión sevillana?
el proyecto que se aprueba mañana cuenta con una inversión de 400 millones
Arranca el esperado proyecto urbanístico entre Nervión y el Polígono San Pablo. El gobierno municipal aprobará mañana el desbloqueo de los suelos de la antigua fábrica de Cruzcampo, lo que creará un nuevo barrio para Sevilla con unas 2.000 viviendas, un gran pulmón verde de siete hectáreas y un espacio para la nueva comisaría de Policía Nacional. La reurbanización de los suelos arranca a lo largo de 2023 y contempla una gran avenida y un anfiteatro.
Se trata de una de las mayores bolsas de suelo (200.000 metros cuadrados) pendientes de desarrollo dentro de la ciudad que llevaba pendiente más de dos décadas, que se ha logrado desbloquear en los últimos años y que supondrá una inversión en urbanización de unos 9,8 millones de euros sobre un gasto total estimado en 400 millones para generar un nuevo barrio. “Se trata de un proyecto de ciudad, con el que la ciudad sigue creciendo y con una enorme inversión económica y empresarial que supondrá un gran impulso, tanto en viviendas como en equipamientos, espacios públicos y zonas verdes, para el distrito San Pablo-Santa Justa. Con este proyecto, pasamos una nueva página, como también lo hemos hecho con la fábrica de tabacos de Los Remedios, el edificio de la antigua comisaría de la Gavidia, la Fábrica de Vidrio, el entorno de Santa Justa, la algodonera de Alcosa, Palmas Altas, Pítamo, Hacienda del Rosario, La Florida o Barqueta, por poner algunos ejemplos”, comentó Antonio Muñoz durante la presentación del proyecto.
El proyecto elaborado por la junta de compensación, entre cuyos miembros está el propio Ayuntamiento de Sevilla junto con propietarios privados, recoge que el 68% de los suelos tengan usos públicos con un gran parque, que será un gran pulmón verde con 70.000 metros cuadrados, nuevos espacios libres y viarios, una nueva comisaría de la Policía Nacional (cuyos terrenos ya están cedidos al Ministerio del Interior) y parcelas para equipamientos deportivos, culturales o educativos. Por otro lado, diversas promociones inmobiliarias con casi 2.000 nuevas viviendas, de ellas 1.073 serán de renta libre y 890 de carácter público destinadas principalmente a jóvenes que inicien sus proyectos familiares en este nuevo barrio. Por último, se contribuirá a la generación de actividad económica y empresarial con 29.000 metros cuadrados de suelos para uso terciario.
En paralelo a las obras de urbanización de los suelos, Emvisesa tiene en su programación que a partir del próximo año pueda comenzar la edificación de la primera de las promociones de VPO. Serán 92 viviendas con un diseño innovador, sostenible y adaptado al entorno diseñado tras un concurso de ideas coordinado por el Colegio de Arquitectos y la Escuela de Arquitectura.
En el proyecto se defiende que el parque cobrará un gran protagonismo en este nuevo barrio de San Pablo, con equipamientos de juegos infantiles innovadores, espacios deportivos y para la convivencia vecina, un anfiteatro para realizar actividades culturales al aire libre, arbolado, plantas y arbustos y estructura de sombras. Destacará también la protección patrimonial del edificio denominado Palomar de la antigua fábrica de Cruzcampo, existirá una importante dotación de itinerarios peatonales y se generará como elemento vertebrador del barrio una gran avenida.
La Junta de Compensación desarrollará el proyecto durante 2023 y el plazo estimado para las obras es de 18-20 meses. “Desde el Ayuntamiento de Sevilla vamos a trabajar al máximo para conseguir que este nuevo barrio esto sea una realidad. Sevilla está creciendo, tomando impulso y demostrando que es una ciudad viva, dinámica y repleta de oportunidades”, concluyó el alcalde.
Lo sucedido con los terrenos de la Cruzcampo tiene su historia. A finales de septiembre de 2006, Alfredo Sánchez Monteseirín presentó el proyecto y se hizo una foto de familia en el balcón del Ayuntamiento con los cuatro arquitectos designados para diseñar esa reforma: el sevillano Guillermo Vázquez Consuegra, el francés Jean Nouvel, el británico Norman Foster, y el japonés Arata Isozaki. El proyecto quedó en un cajón del Ayuntamiento.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
13 Comentarios