1.000 multas al día

La Hacienda municipal ha tramitado 149.938 multas entre los meses de enero y mayo de 2012, lo que supone una media de mil denuncias diarias. En esta cantidad se incluyen tanto las sanciones de tráfico, que son la mayoría, como las de las distintas ordenanzas municipales, ya que el dato corresponde a todos los expedientes sancionadores tramitados hasta la fecha actual por la Agencia Tributaria.

El número de multas impuestas en los primeros cinco meses de 2012 se ha incrementado considerablemente en relación con el mismo periodo del año anterior. Entre enero y mayo de 2011 el Ayuntamiento tramitó 102.466 expedientes de sanción. Esto significa que este año se han puesto un 33% más de multas que en el ejercicio anterior, si bien hay que tener en cuenta que 2011 fue un año electoral. Precisamente en mayo se celebraron las elecciones municipales, por lo que la presión recaudatoria fue mucho más leve que en otras temporadas.

De hecho, si se compara la cifra actual con los años anteriores al pasado se obtienen resultados muy similares. Según los datos facilitados a este periódico por el Ayuntamiento de Sevilla, entre enero y mayo de 2010 se habían tramitado 144.785 denuncias, lo que supondría una diferencia mínima, inferior al 4%, con relación a 2012. El ejercicio anterior, 2009, fue todavía más lucrativo que el actual para el Ayuntamiento, que a finales de mayo ya llevaba 153.521 multas, es decir, un 2% más que en el mismo periodo de 2012. Ésta fue la única vez que se superó la media del millar de multas diarias en el último lustro.

Si se compara el dato actual con fechas anteriores, como 2008, la diferencia vuelve a aumentarse, ya que entre enero y mayo de este año se incoaron 131.370 expedientes. Traducido a porcentajes, supone un 14% menos que los tramitados en el mismo periodo del año 2012.

La inmensa mayoría de las sanciones corresponden a infracciones de tráfico, englobando en esta materia las multas por sobrepasar el horario de estacionamiento regulado en la zona azul. Sirvan como ejemplo los datos de 2011, que se cerró en diciembre con 149.429 denuncias por zona azul, otras 110.593 impuestas por la Policía Local y 28.816 por infracciones detectadas por el vehículo de disciplina vial, coche conocido popularmente con el sobrenombre de ponemultas.

Para este año, se espera una subida de las denuncias de este vehículo, ya que en 2011 estuvo durante algunos periodos sin salir. Tras sufrir averías en los primeros años, que lo llevaron a permanecer inactivo durante meses, el ponemultas está saliendo a la calle a diario. Esto se traduce necesariamente en un incremento de las denuncias, ya que el sistema informático del vehículo es capaz de multar en marcha y, por tanto, mucho más rápido que el método manual de los policías locales.

Además, en el momento en que se detecta la infracción, ésta queda registrada en los ordenadores de la Agencia Tributaria. Esto permite acortar enormemente los plazos en la notificación. Como ejemplo, una denuncia impuesta por el coche ponemultas a un vehículo aparcado de manera indebida en una calle del distrito San Pablo-Santa Justa. La infracción fue detectada el 8 de mayo y se abrió el expediente el día 22, justo dos semanas después. La multa fue notificada al propietario del vehículo el día 29 de mayo. Es decir, transcurrieron menos de tres semanas en todo el proceso, cuando el plazo máximo legal es de tres meses. Esto refleja la rapidez con la que el Ayuntamiento está recaudando este tipo de sanciones, que además suelen pagarse anticipadamente para obtener la reducción del 50%.

Entre estos casi 150.000 expedientes abiertos en 2012 están también los correspondientes a las infracciones a las ordenanzas municipales. Entre ellos figuran las primeras denuncias a los clientes de la prostitución callejera, aproximadamente treinta desde principios de año, y las de los gorrillas, que están en torno al medio millar.

El número de expedientes tramitados por el Fisco local hasta mayo podría haber sido más elevado de no haberse casi paralizado el número de denuncias de tráfico en abril por la huelga de bolis caídos de la Policía Local en protesta por el impago de los atrasos.