La mitad de los menores de tres años de Sevilla acuden a la guardería

Las guarderías se han convertido en un servicio imprescindible en muchas familias sevillanas para lograr la conciliación. Además de su componente pedagógico, las escuelas infantiles se hacen cargo de los niños menores de tres años mientras los padres trabajan, de ahí que las matriculaciones vayan en aumento, pese a la crisis de natalidad que ha dejado sin cubrir más de 10.000 plazas en este inicio de curso.

Así se desprende de los datos aportados por la Consejería de Desarrollo Educativo y FP. Un total de 23.182 niños están matriculados este curso en los 608 centros que conforman la red pública del primer ciclo de Infantil en la provincia. Dicha cifra supone un incremento anual de 435 escolarizados.

El número de alumnos hay que ponderarlo con la población infantil de entre 0 y 2 años empadronada en la provincia. Los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE) son de 2022. En función de esta información, dicho grupo lo conforman 46.504 menores, de los que el 49,84% (prácticamente la mitad) acude a las guarderías.

El doble de centros en una década

La tasa de escolarización, por tanto, llega al 50% en la población infantil menor de tres años. Una cifra que hasta no hace mucho era bien distinta. A ello ha contribuido la expansión de la red pública que presta este servicio, conformada en su mayoría por centros de convenio adheridos al programa de ayudas de la Junta de Andalucía.

Si en 2011 la componían 362 escuelas, ahora esta cifra está a punto de duplicarse al alcanzar las 608. De igual modo lo ha hecho el número de plazas. De los 22.098 puestos de 2011 a los 33.566 actuales, un aumento del 52% que ha resultado clave para lograr esa tasa de escolarización.

Otra referencia clave es la tasa de cobertura, es decir, qué proporción de esa población infantil tiene acceso a la red pública. Actualmente es del 72%, porcentaje que a principios de la década pasada se quedaba en el 31%, dos puntos por debajo del mínimo aconsejado por la Unión Europea. Ahora esa recomendación se supera ampliamente y tres cuartas partes de los niños sevillanos con menos de tres años tienen garantizado el acceso a una escuela de la red pública.

Muy por encima de Europa

La tasa de escolarización de Sevilla es una de las más altas de España, que presenta una media del 41,1%, cifra que se reduce a la mitad en la Unión Europea (22,4%). También supera la tasa de los países que conforman la OCDE (Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico), que se queda en el 25%.

Dentro del viejo continente, lo únicos países que superan a España en incorporación temprana al sistema educativo son Francia (donde la escolarización es obligatoria a partir de los tres años), Bélgica y Dinamarca. Los últimos puestos del listado los ocupan Grecia, Croacia, Eslovaquia y Rumanía, donde las tasas se han incrementado los últimos cursos.

Detrás de esta escolarización temprana existen múltiples factores, pero el principal lo motiva la necesidad de conciliación familiar. La pronta incorporación de los padres y madres al mercado de trabajo tras los nacimientos provoca que cada vez resulte más necesario que un niño se matricule en una guardería.

Pros y contras de la escolarización temprana

Sobre el acceso temprano a los centros educativos existen numerosas teorías. Algunas a favor de que los menores acudan cuanto antes a la escuela y otras que consideran más conveniente que la incorporación se realice, incluso, cumplidos los siete años. Este argumento quedó avalado en un estudio publicado en 2016 por la Universidad de Standford (California). En Andalucía, la Asociación de Escuelas Infantiles Unidas, una de las principales patronales del sector, defiende la importancia de esta etapa en el desarrollo cognitivo de los menores y en su futuro académico.

De hecho, la matriculación de niños de dos años en uno de estos centros repercute luego en la escolarización en los colegios, al otorgársele a las familias un punto más cuando solicitan plaza para el segundo ciclo de Infantil. La Junta otorga cuantiosas ayudas para costear esta etapa. La Consejería de Desarrollo Educativo ha destinado 238 millones de euros a tal fin, cantidad de la que se benefician más de 55.000 alumnos en toda la comunidad.