Una menor se cae tras romperse el váter de un colegio de Sevilla

Una menor de siete años ha sufrido esta semana un accidente en el colegio público San Pablo, en Sevilla, al romperse el váter del aseo, uno de los pocos que se encuentran en funcionamiento. La familia de la alumna tiene pensado presentar una denuncia por la situación de abandono en la Policía Local.

La niña, que sufrió heridas leves en el percance, cayó al suelo cuando se rompió por completo el sanitario, lo que provocó la alarma en el centro educativo por el estruendo. La asociación de padres y madres de alumnos (AMPA) del CEIP San Pablo lamenta la dejadez en la que las autoridades municipales tienen sumido el colegio.

"En toda el área de Infantil sólo está operativo un wc. En Primaria hay otro cerrado por avería y el pasado martes una menor, al apoyarse en uno de los váteres que supuestamente está bien, éste se desmoronó también", detallan las familias.

Con la puerta rota

Por si fuera poco, el centro se encuentra sin servicio de portería y con la puerta principal rota. "Durante el fin de semana alguien cometió el acto vandálico de romper la puerta de acceso al colegio. Llevamos avisando al Ayuntamiento desde el lunes de la gravedad del asunto, ya que la puerta no cierra correctamente. Ayer estuvo abierta toda la noche y durante las horas de colegio también se queda abierta, con la consecuente y gravísima falta de seguridad. Puede entrar cualquiera o puede haber un descuido y que salga un niño", advierte el AMPA.

A este situación se suma otro agravante: el CEIP San Pablo lleva tres semanas sin personal de portería, es decir, de personal pendiente de quien sale y entra de las instalaciones y de atender a las personas. "La tormenta perfecta", alertan los padres.

Un año de Bernard

El "abandono" del colegio viene de lejos. Ya se ha cumplido un año del paso de la tormenta Bernad, que provocó la caída del techo del patio de Infantil. Nada se ha resuelto desde entonces. El estropicio continúa y las vallas "provisionales" que colocó el Ayuntamiento, también.

"Cada vez que llueve entra agua al interior del edificio, originando goteras, humedades y desprendimiento de pintura", señalan los padres. Las deficiencias van en aumento. "Los patios de hormigón están resquebrajándose por todos lados, lo que provoca continuas caídas, golpes y lesiones a los menores y al personal del colegio", aseguran.

"Total dejadez"

El malestar de las familias crece cada día. "El colegio debería ser la segunda casa de los niños y, como mínimo, un lugar seguro. Estamos sufriendo en el San Pablo la total dejadez por parte de un Ayuntamiento que no para de repetir que los colegios son prioridad, pero no ha llevado a cabo ni una sola actuación en nuestro centro y ni tan siquiera efectúa el mantenimiento mínimo e indispensable de un edificio de responsabilidad municipal". Crítica publicada por el AMPA en las redes sociales.

"Las familias ya estamos desesperadas con esto, no sabemos si se trata de dejadez con los niños, con el San Pablo en concreto o con el barrio en general, ya que nos consta que en otros centros si se actúa más rápido", apostillan.