Matrimonio estafado por la agencia Lunas de Miel Sevilla: "Todo era falso, no teníamos billete de vuelta y nos debe 10.000 euros"

SEVILLA/El viaje de novios de Marina Navarro (1996) y Adrián Pérez (1990) no ha salido todo lo bien que la pareja imaginó cuando decidieron darse el sí quiero el pasado 14 de septiembre.

Se trata de un joven matrimonio, gerentes de un taller del Polígono Calonge (Sevilla), que forma parte del centenar de afectados estafados por la agencia de viajes Lunas de Miel Sevilla.

Marina y Adrián decidieron el lunes poner en conocimiento de la Policía Nacional lo que había sucedido y denunciar la estafa, dado que la agencia, que no figura ya en el registro mercantil, les debe más de 10.000 euros.

La historia del engaño se remonta al mes de junio, cuando comenzaron a organizar su viaje de novios con la citada agencia a través de Manuel, su gerente.

"Daba largas y me hizo una transferencia falsa"

Tras solicitar el presupuesto, el matrimonio confiado en el buen hacer de una agencia de viajes con años de trayectoria y otras referencias, realizó un primer pago como reserva.

Tras el primer abono, ni un solo comprobante de pago.

Este primer detalle ya hizo sospechar a la pareja: "A mi me extrañaba que pidera el dinero tan dinero, y sin ningún papel", sostiene Adrián.

"Pedía el dinero y mandaba comprobantes falsos"

A los pocos días, Marina percibió que al realizar la transferencia de pago de la reserva del viaje, el nombre del destinatario no se correspondía con ninguna sociedad. Era una persona física: Antonio, marido de Manuel; y segundo detenido este martes en el caso de la estafa.

La situación continuó complicándose cuando llegó el momento de viajar.

En el momento del embarqure con destino a Indonesia, la pareja se percató por los trabajadores del aeropuerto que el billete había sido sacado la misma mañana del día del viaje, y la sorpresa no quedó ahí.

Tras la llegada a Bali, se dieron cuenta en la recepción del primer hotel que la reserva estaba hecha igualmente a nombre de Antonio: el matrimonio no figuraba como huéspedes.

Excusas para no afrontar pagos

Con el transcuro de los días en Bali todo fue a peor: la primera etapa del viaje consistía en una ruta con excursiones que, en teoría, estaban reservadas y abonadas pero que no resultó ser así cuando llegaron a su destino.

Ni una excursión pagada.

Misma sorpresa para la segunda parte del viaje donde tenían contratado un todo incluido: no había rastro de la reserva, ni del pago.

El matrimonio tuvo que afrontar el gasto tirando de su propia liquidez, al igual que en el viaje de vuelta, del que tampoco había constancia. Tampoco tenían seguro de viaje.

"Aún así, nos sentimos afortuados porque hemos tenido la suerte de tirar de nuestros ahorros por nuestra empresa. Otras parejas han tenido que dormir en la calle por culpa de esta estafa", mantiene Marina.

Ni billete de vuelta ni seguro de viaje

"Estaba muy asustada por mi marido, es diabético; si le hubiera dado una bajada de azúcar no sé qué habríamos hecho", mantiene Marina aliviada una vez comprobaron a su vuelta que su seguro privado de salud podía cubrir situaciones en el extranjero.

Hasta 10.000 euros es el montante total que el matrimonio ha ido adelantando gracias a la solvencia de su negocio.

La situación ha explotado cuando la pareja se ha visto obligada, como cada empresa, a realizar el IVA trimestral, y se han encontrado con dificultades a la hora de justificar los pagos dado que no han recibido ningún tipo de comprobante por parte de la agencia ni hay otra forma de demostrar lo ocurrido.