Un juzgado de Sevilla abre diligencias por el tiroteo en el que fue abatido un hombre

Los hechos ocurrieron la noche de los Reyes Magos en la calle Carena, en la barriada de Madre de Dios

La Policía tuvo que abatir al hombre, de 38 años y enfermo mental, que les atacó con dos cuchillos

La calle Carena, en la que ocurrieron los hechos.
La calle Carena, en la que ocurrieron los hechos. / Juan Carlos Vázquez

El juzgado de Instrucción número 9 de Sevilla ha abierto diligencias de investigación sobre el tiroteo ocurrido la noche de los Reyes Magos en la calle Carena, en el barrio de Madre de Dios, donde la Policía tuvo que abatir a tiros a un hombre de 38 años que se había atrincherado en un domicilio. El hombre, que padecía una enfermedad mental, atacó a los agentes con dos cuchillos cuando éstos accedieron a la casa.

Los hechos ocurrieron sobre las diez de la noche del 5 de enero. A esa hora, el 091 recibió varias llamadas alertando de que un hombre con problemas mentales amenazaba con matar a otra persona empuñando un arma blanca. Agentes de la Policía Nacional acudieron al lugar y activaron el protocolo de incidentes críticos. Se estableció un perímetro de seguridad y se llamó al Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES).

Un negociador de la Policía se desplazó desde la provincia de Cádiz para intentar que el hombre depusiera su actitud agresiva. No fue posible. A medida que avanzaba la noche se sucedieron escenas de tensión, pues el hombre seguía gritando que iba a matar a alguien. Después, dejó de escucharse, por lo que los policías creyeron que podía haber intentado autolesionarse. Los agentes se prepararon para entrar en la vivienda tras varias horas desde que se inició la secuencia de los hechos.

El equipo táctico del GOES accedió a la vivienda por una ventana, utilizando para ello la escala de un vehículo de los Bomberos. Al entrar, el primer policía que lo hizo se encontró con una mesa junto a la ventana, por lo que tuvo que acceder pasando por encima de la mesa. En ese momento, la mesa se rompió y el policía cayó al suelo, lo que aprovechó el sospechoso para atacar al policía con dos cuchillos, uno en cada mano. Los agentes tuvieron que abrir fuego contra él para repeler la agresión.

El hombre falleció poco después como consecuencia de los disparos. Durante un tiempo, los servicios médicos de los Bomberos y del 061 intentaron reanimar al agresor, sin éxito. La defunción se certificó finalmente pasadas las dos y media de la mañana.

Como es habitual cada vez que se produce un incidente de este tipo, el juzgado que se encontraba de guardia la noche de los hechos ha abierto diligencias previas para investigar las circunstancias del caso y cómo se produjo el tiroteo. En este proceso, uno de los primeros pasos tendrá que ser la citación a declarar de los policías que intervinieron aquella noche en la barriada de Madre de Dios.

La familia del hombre que fue abatido no se ha pronunciado aún públicamente sobre lo ocurrido, si bien varias personas de su entorno han solicitado a todos aquellos que grabaran algo aquella noche que le faciliten las imágenes de cara a una posible acción judicial o reclamación. Una persona vinculada a la familia aseguró a este periódico que está a la espera de los resultados de la autopsia para ofrecer información sobre el asunto.

Existen varios precedentes ocurridos en Sevilla en los que los agentes de las Fuerzas de Seguridad se vieron obligadas a abrir fuego contra personas que les atacaban. El más reciente ocurrió durante un registro en Coria del Río, donde también participó el equipo táctico del GOES de la Policía Nacional en Sevilla. Un sospechoso abrió fuego con una escopeta contra los agentes, que habían ido a detenerlo por su participación en un homicidio. En verano de 2021, dos policías locales abatieron a un atracador en un supermercado de AmateAmate, mientras que en 2019 la Policía Nacional abatió a un hombre que irrumpió armado en la comisaría de NerviónNervión.

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