El 28% de los ingresos de la Iglesia de Sevilla fueron aportaciones de los fieles

La Iglesia de Sevilla movió durante el ejercicio del año 2017 un total de 45.342.297 euros, un 3,8% más que el año anterior. La mayor parte de los gastos, el 34,38% se destinó a la conservación y mantenimiento del gran patrimonio inmueble. Por su parte, los ingresos llagaron principalmente de manos de las aportaciones voluntarias de los fieles (28%), y de otras aportaciones corrientes, como Cáritas, las parroquias o la visita cultural de la Catedral, que se incrementó un 11%. El arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo; y el ecónomo diocesano, Alberto Benito, dieron a conocer ayer las principales cifras de la economía de la Iglesia hispalense.

El arzobispo recordó durante su intervención “el ejercicio de transparencia” que hace la Archidiócesis de Sevilla desde los tiempos de Amigo Vallejo a la hora de presentar y auditar sus cuentas. “No tenemos obligación legal de ello. Nuestro plan de transparencia está considerado uno de los más importantes de las diócesis españolas. También hemos sido pioneros a la hora de implantar un protectorado canónico para que las fundaciones o hermandades presenten sus cuentas”. El prelado hispalense agradeció a los fieles sus aportaciones, mediante cuotas, y la generosidad a la hora de marcar la casilla de la Iglesia en la declaración de la Renta. Asenjo destacó el gran aumento que han experimentado en los últimos años las herencias, legados y donaciones a favor de la Archidiócesis. También congratuló del incremento de las aportaciones de las hermandades al Fondo Común Diocesano y de sus ayudas para el sostenimiento del Seminario Metropolitano: “Gracias a ello no le cuesta dinero a la Archidiócesis. Las hermandades son conscientes de que el Seminario es el corazón de la Archidiócesis. Además colaboran con los Cetros de Orientación Familiar, Cáritas y otras obras sociales”.

Tanto Asenjo como el Ecónomo, Alberto Benito, incidieron en que el balance económico cada vez depende menos de la cantidad recibida a través de la asignación tributaria. El año pasado se percibieron a través del Fondo Común Interdiocesano 6,1 millones, frente a los 6,4 millones del año 2016. Fueron 309.011 los sevillanos que marcaron la casilla de la Iglesia en el año 2017, un 42% de las declaraciones presentadas. “El número de declaraciones bajó levemente, pero aumentó la cantidad”. El porcentaje total de declarante a favor de la Iglesia Católica en España fue del 33,5%. En este sentido, Asenjo recordó que la Iglesia devuelve a la sociedad un 38% más de lo que recibe.

La cuenta de explotación del ejercicio económico de 2017 arrojó unos ingresos de 45.342.297, 11 euros. Los fieles a través de su generosidad aportaron 12,7 millones: 1,5 en colectas; 2,6 en suscripción de cuotas; 2,5 en colectas destinadas a diferentes instituciones; y 6,1 mediante otro tipo de colaboraciones. En lo que se refiere a los gastos, la Iglesia de Sevilla dedicó la mayor parte de sus recursos al patrimonio y gastos de funcionamiento. Otros 14 millones fueron para las retribuciones tanto del clero como del personal seglar. En acciones pastorales y asistenciales se emplearon 7,2 millones.

En lo que respecta a las cuentas el Cabildo Catedral, los ingresos aumentaron en 1,5 millones con respecto a 2016, hasta alcanzar los 14,5. La inmensa mayoría (14,1%) fueron por la venta de entradas para la visita cultural, que se incrementó más de un 18% con respecto al año 2016. La mayor parte del dinero se empleó en la conservación y los gastos de funcionamiento. A acciones pastorales y asistenciales fueron a parar 5,3 millones.