Primer miércoles de huelga en Atención Primaria en Sevilla: "Los médicos ya no creen en nada"
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Los facultativos de familia y pediatras sevillanos vuelven a la huelga casi tres meses después de firmar un pacto con el SAS del que, denuncian, "no se ha cumplido nada"
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Desengañados, desesperados y frustrados. A los médicos se les agota la paciencia. Han pasado 77 días desde aquel 25 de enero en el que un acuerdo in extremis salvó la huelga convocada por el Sindicato Médico Andaluz. "Nada ha cambiado desde entonces", afirma contundente el presidente de la rama de Atención Primaria de la delegación sindical en Sevilla, Rafael Gómez. Una especie de déjà vu que para este pediatra no es más que "la crónica de una muerte anunciada", la de la Atención Primaria.
Recibe a este periódico en la sede del sindicato, junto a su presidente, Rafael Ojeda, cuando quedan menos de doce horas para que se lleve a cabo un nuevo paro. Un hilo de esperanza mantenía el día previo la posibilidad de frenar esta convocatoria, a la espera de las negociaciones en la Mesa Técnica de Atención Primaria que, durante ocho horas, se reunió el lunes, sin embargo, todo quedó en aguas de borrajas. Se aprecia decepción, frustración y desesperación en sus rostros. "Somos el reflejo de como están los médicos de Atención Primaria. Están quemados, indignados, cansados, desmoralizados y desengañados. Ya no creen en nada", sostiene Rafael Gómez. "Nos venden que está ya todo acordado y ni lo que firman son capaces de cumplir. Lo que estamos viviendo es el resultado de una dejación, de un engaño. Esta Administración es experta en aparentar una negociación que es inexistente. En la práctica no cambia nada", añade Rafael Ojeda.
Como consecuencia, los más de un millar de médicos de cabecera y pediatras de la provincia de Sevilla están llamados de nuevo a parar. En esta ocasión han elevado la presión y los paros están previstos de 8:00 a 20:00 todos los miércoles desde hoy, Día de la Atención Primaria, hasta el 24 de mayo; es decir, los dos meses de precampaña y campaña electoral de las elecciones municipales del 28 de ese mes. "No se ha puesto en marcha el acuerdo. Hay una falta de cumplimiento de aquel compromiso que evitó la huelga (del 27 de enero), que ha quedado totalmente paralizado", apunta Rafael Gómez.
La convocatoria prevé paros de 12 horas, coincidiendo con los horarios de apertura de los centros de salud. Pero se complementarán con concentraciones esos días que rotarán por las diferentes capitales provinciales. En el caso de Sevilla, está prevista una manifestación hoy mismo, con carácter regional y como pistoletazo de salida, que comenzará con una concentración en el Palacio de San Telmo a las 11:30 horas. Habrá otra concentración el 3 de mayo y una segundo movilización el día 24 del mismo mes, cuando está previsto que paren las protestas, según la actual convocatoria.
Los portavoces del SMS coinciden en que es difícil saber si la ciudadanía entiende el motivo de tantas protestas y reivindicaciones del personal sanitario, pero consideran que es hora "de dar un golpe sobre la mesa". "En las circunstancias en las que estamos, es probable que en menos de una década nos veamos sin médicos en Atención Primaria", afirma contundente Rafael Ojeda. "Esto es algo que la ciudadanía tiene que entender y hacerse cargo de la gravedad de la problemática a lo que nos enfrentamos por una cuestión de condiciones laborales", explica. "Cualquiera entiende que, dados a elegir, lo lógico es escoger donde mejor te tratan. Pues eso es lo que está pasando con la Medicina Familiar y el resto de especialidades médicas de hospital", subraya.
Reivindicaciones
La primera reivindicación de los facultativos de Atención Primaria es la limitación de las agendas (35 pacientes para médicos de familia y 25 en la continuidad asistencial y en pediatra 25 y 18). Profesionales y diferentes sindicatos han denunciado en repetidas ocasiones que los profesionales pueden llegar a ver entre 50 y 60 pacientes diarios, lo que entraña –denuncian– una merma de calidad para la asistencia, una sobrecarga para los médicos y un mayor riesgo de cometer errores.
Para cumplir el acuerdo entre el SAS y el Sindicato Médico del pasado 25 de enero, la Consejería de Salud se marcó un mes. "Lo tenemos firmado por el gerente Diego Vargas", apostilla Gómez. Según la entidad sindical apenas se ha puesto en práctica en algunos centros en los que, denuncian los portavoces del SMS, coincidiendo con la nueva convocatoria de huelga, "se ha suspendido".
Explican que el acuerdo ya partía con la traba de que hay muchos sitios donde sólo hay un médico donde sería imposible fijar agendas de 35 pacientes sin hacer más contrataciones, pero, indica Gómez, habrían obtenido el compromiso de la Administración de incentivar esos centros con menos personal e implantarlo en aquellos otros con un número de médicos suficientes para que siempre haya uno para atender las consultas que sobrepasen de 35. "Ni se ha incentivado nada ni se ha puesto en marcha la limitación de agendas salvo en contados casos", se lamentan.
Ésta es la única negociación que se abordó en enero y que consiguió parar la huelga entonces. "Es sólo una mínima parte de nuestras reivindicaciones", apuntan Ojeda y Gómez. Además, el sindicato exige la equiparación retributiva del médico de Atención Primaria al médico de hospital. "Esta equiparación debe comenzar de manera inmediata", subrayan. "Cobramos menos que los médicos de hospital y, con esto, lo único que le estamos diciendo a los que ahora están estudiando es que en los hospitales hay mejores condiciones. ¿Quién se va a querer quedar en Primaria?", se preguntan. "Exigimos que se igualen las condiciones retributivas de todos los médicos por igual, todos tienen la misma formación. Que las condiciones laborales dejen de ser el factor que condiciona la elección de una especialidad, que sean las preferencias personales. Sin condenamos la Atención Primaria a la precariedad, lo normal es que se vayan. Como está pasando", apostilla Rafael Ojeda.
El sindicato también reclama el "fin de la discriminación" de los profesionales del Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) respecto a los del 061. A pesar de que los facultativos de ambas entidades deberían trabajar con los mismos derechos, denuncian que esto no ocurre y que los del SUAP sufren un agravio comparativo que les lleva a cobrar menos y a tener peores recursos técnicos y humanos que sus compañeros del 061. Otras reivindicaciones son que se incentiven con medidas administrativas y económicas los puestos de difícil cobertura, que el complemento CRP pase a la masa salarial fija, que los salarios se equiparen a la media nacional y que se avance en la reclasificación de la carrera profesional.
En caso de que no se avance en nada de esto, Ojeda y Gómez lo tienen claro. "La Atención Primaria desaparecerá. Es a lo que cada vez está más abocada e, incluso, me empiezo a plantear que, quizás, eso es lo que quieran. Pero recordemos que la Atención Primaria es el pilar fundamental por el que se basa nuestro sistema sanitario. Si nos falla eso, nos va a fallar todo el sistema", sentencia Rafael Gómez.
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