Los hosteleros aplauden la apertura del palacio

Los hoteleros, hosteleros y agencias de viajes aplauden el anuncio sobre la próxima inauguración de Fibes y esperan que la atracción de visitantes del nuevo Palacio de Exposiciones y Congresos provoque un impacto muy positivo en la economía sevillana, si bien la generación de riqueza del nuevo recinto dependerá de la capacidad para organizar grandes eventos y espectáculos en los próximos años.

Para Antonio Távora, presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Sevilla, el estreno de Fibes se ha retrasado demasiado, aunque, sin duda, es una noticia positiva para la ciudad: "Llega demasiado tarde cuando ya han pasado las mejores temporadas para el mercado de congresos, un sector muy resentido ahora por la crisis, ya que este tipo de eventos suele ser un capítulo que las las grandes empresas suelen recortar para afrontar estos tiempos de crisis". Távora recuerda que en 2008 ya logró ganar un concurso para atraer a Sevilla un congreso que ya entonces debería haberse celebrado en el Fibes, mucho antes del próximo septiembre. "Este proyecto se ha retrasado mucho", insiste.

Es demasiado pronto para cuantificar el posible impacto del nuevo Fibes, si bien los sectores implicados esperan la dinamización de la ciudad. "Dará nuevas oportunidades a Sevilla para competir en el mercado de los congresos, de enorme importancia", comenta Santiago Padilla, gerente de los hoteleros, al recordar que la ciudad cuenta con más de 20.000 plazas de hotel que "cada día hay que tratar de llenar". El nuevo recinto de exposiciones y congresos "tendrá un impacto directo en los hoteles así como en los sectores satélite", añade. Para Padilla lo "importante ahora es canalizar el flujo de la demanda".

El presidente de la Asociación de Hosteleros de Sevilla, Pedro Sánchez Cuerda, también aguarda con "gran ilusión" el estreno de Fibes. Para el portavoz del sector de la hostelería, esta apertura "es absolutamente necesaria para Sevilla ya que nos dará la posibilidad para competir en nuevos escenarios en los que, hasta ahora, no podíamo hablar".

En cuanto al perfil del congresista, Sánchez Cuerda recuerda que se trata de un visitante de "mucha calidad" que suele llegar con un acompañante que suele aprovechar las jornadas de los congresos para conocer Sevilla, ir de compras y disfrutar de la ciudad, de modo que el sector del comercio también se beneficia de este tipo de turismo. Por ejemplo, ante un congreso de 5.000 personas, "las plazas hoteleras que se ocupan durante el desarrollo del evento es el doble, al menos", a lo que hay que sumar las comidas auxiliares, junto a las que se organizan en el propio Palacio de Exposiciones y Congresos.

Távora recuerda que la celebración de los grandes congresos se organiza con cuatro o cinco años de anticipación y apunta a la necesidad de iniciativas para atraerlos a Sevilla. "Junto a los congresos Fibes también está preparado para acoger grandes espectáculos musicales que permitirán a Sevilla competir con otras ciudades como Madrid o Barcelona".