Herida una mujer atropellada por un autobús de Tussam cuando iba en un patinete en Sevilla

El accidente ocurrió a primera hora de la mañana de este jueves en la avenida de Carlos V

Una testigo asegura que el conductor del autobús, de la línea 25, se saltó el semáforo en rojo y arrolló a la joven

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El autobús de Tussam accidentado. / Emergencias Sevilla

Una joven de 26 años resultó herida la mañana de este jueves en Sevilla tras ser atropellada por un autobús de Tussam. La mujer circulaba en un patinete eléctrico. El accidente se produjo a las nueve menos cuarto de la mañana en la avenida de Carlos V, en el Prado de San Sebastián, según informó escuetamente el Ayuntamiento de Sevilla a través de los perfiles en redes sociales de los servicios de emergencias.

Según el Consistorio, la víctima "irrumpió en la calzada al paso de un autobús urbano", versión que difiere notablemente de la ofrecida a este periódico por una testigo, que sostiene que fue el conductor del autobús el que se saltó el semáforo en rojo.

Es más, la misma testigo relató que pudo ver también que otro empleado de Tussam se acercaba al conductor implicado en el siniestro y lo calmaba con frases como "tú no te pongas nervioso" y "tú di que estaba en verde para ti y ya está". Esta mujer indicó además que pasa a diario por la zona varias veces y puede ver que los autobuses se saltan ese mismo semáforo con asiduidad. El autobús implicado en el siniestro cubría la línea 25 de Tussam, que conecta el Prado de San Sebastián.

La Policía Local de Sevilla ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias que rodean este atropello. La joven fue trasladada a un hospital, "consciente y con lesiones sin pronosticar", según la información oficial facilitada por Emergencias Sevilla. Fuentes municipales no han ofrecido más información de este siniestro al haber una investigación abierta.

La testigo, que fue corriendo a socorrer a la víctima, detalló que ésta "tenía la cara llena de sangre, se hizo una raja en la frente y el labio también dañado". No llevaba casco, algo que sigue sin ser obligatorio aunque sí es aconsejable. "Estaba muy nerviosa y desorientada, preguntando qué le había pasado y qué hacía allí".

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