Hallan el cuerpo de Ester Estepa, la sevillana que sería la sexta víctima del asesino Dinamita Montilla

La Policía Nacional encontró esta semana el cuerpo de María Ester Estepa Pérez, una sevillana de 42 años que desapareció el 21 de agosto de 2023 en Gandía (Valencia). El cadáver estaba oculto bajo unas cañas, en una mediana intransitable entre la carretera de la playa de Gandia y la N-332, según avanzó este viernes el diario Levante. La Policía estaba buscando el cuerpo en esta zona después de que el pasado mes de febrero se hallara en ella un cráneo, que semanas después se pudo confirmar mediante las pruebas biológicas que era de la mujer desaparecida.

Los restos estaban ya esqueletizados y junto a ellos apareció su ropa y su documentación, según añade el rotativo valenciano. El 2 de febrero, dos senderitas encontraron el cráneo de la mujer entre la maleza en un amplio terreno lleno de maleza entre las dos citadas carreteras. No se hallaron entonces más restos. El cráneo fue analizado por los forenses del Instituto de Medicina Legal y por la Policía Científica, que extrajeron muestras de los huesos alveolares para tratar de obtener la identificación por ADN. Cuatro meses más tarde, a principios de junio, los análisis confirmaron que era la cabeza de Ester Estepa.

Tras obtener esta confirmación, el juez del caso ordenó una búsqueda del resto del cuerpo en las inmediaciones de la zona en la que se encontró el cráneo. Estas labores de rastreo dieron sus frutos esta semana, cuando los agentes de la Policía Nacional hallaron el cadáver decapitado de la sevillana en una mediana por la que nadie pasaba a pie, oculto bajo unas cañas.

Todo apunta a que Estepa fue víctima del asesino en serie José Jurado Montilla, conocido como Titi o Dinamita Montilla, pues hay constancia de que estuvo con él días antes de su desaparición e incluso pudo mantener una corta relación afectiva con este hombre. La familia de Ester Estepa difundió incluso una fotografía en la que se ve a la mujer en compañía de José Jurado y una tercera persona, tan sólo dos días antes de su desaparición. Incluso, según la prensa local valenciana, el propio asesino llamó a la madre de la desaparecida para decirle que había estado con ella y que le había parecido una persona muy confiada.

De Ester Estepa no se sabía nada desde agosto de 2023. El día 23 de ese mes, su madre recibió un mensaje que cree que no escribió Ester, en el que le decía que no había sido buena hija y que muchas veces no había sido sincera. Llegó incluso a sugerirle que le hiciera una videollamada o mandara una nota de audio, pero la supuesta Ester apagó el teléfono. La madre la llamó pero no obtuvo señal. Después, desde el teléfono de Ester se envió otro mensaje en el que ésta decía que se iba con unas amigas a Argentina, algo que ninguna de sus amistades conocía. Probablemente la mujer ya estaba muerta, pues la última vez que se la vio con vida fue el día 21, después de ser atendida en un hospital de Gandía por un dolor en las piernas.

La madre denunció la desaparición en Sevilla y reveló que Ester había sido una mujer maltratada y tenía miedo de su ex pareja. Estuvo viviendo en un albergue para mujeres víctimas de la violencia machista en Alicante. Según decía, su intención era regresar a Sevilla en septiembre de 2023, pero nunca lo hizo.

Al tener noticias de la detención de José Jurado Montilla, a mediados de mayo, la familia reveló la llamada que éste le hizo tras la desaparición de Ester, así como que había estado con éste en Gandía días antes de su desaparición. Dinamita Montilla fue detenido por su presunta implicación en el crimen de un joven de 21 años cometido en agosto de 2022 en los montes de Málaga. Había sido condenado por cuatro homicidios a finales de los años ochenta.

La detención de este individuo, de 62 años, se produjo en un bar de Valdebótoa (Badajoz), casi dos años después del crimen de un joven de 21 años cuyo cuerpo fue hallado con una herida en la cabeza el 30 de agosto de 2022, en un paraje de los Montes de Málaga, donde sus padres tienen una finca. La muerte de este joven sería la quinta que, de momento, pesa sobre el detenido, que salió de prisión en diciembre de 2013 tras la sentencia del Tribunal de Estrasburgo que tumbó la doctrina Parot, que aplicaba los beneficios penitenciarios sobre la totalidad de la condena.

José Jurado había sido condenado a 123 años de prisión por cuatro homicidios ocurridos en la provincia de Málaga entre 1985 y 1987, cumplió 28 años de condena y quedó en libertad en 2013. Las pesquisas apuntan a que David H. fue asesinado supuestamente de un tiro en la espalda y posteriormente rematado en el suelo, tras cruzarse en mitad del campo con el presunto asesino, al que llegó a ofrecer agua de su propia botella. Unos vestigios biológicos hallados en la cremallera de una mochila de David y el rastro que iba dejando en sus redes sociales, donde es muy activo, llevaron a la Policía Nacional a la localización de José Jurado. Ester Estepa sería su sexta víctima.