Los gorrillas cumplirán sus multas con trabajos en Protección Civil y Lipasam

El Ayuntamiento elabora un catálogo de tareas sociales.

Un gorrilla indica un lugar para aparcar en la Gavidia.
Un gorrilla indica un lugar para aparcar en la Gavidia.
Fernando Pérez Ávila

29 de septiembre 2011 - 05:03

Los gorrillas insolventes podrán canjear sus multas por trabajos en Protección Civil y en Lipasam, entre otros servicios municipales. El Ayuntamiento de Sevilla está actualmente elaborando un catálogo con los trabajos sociales que podrían desempeñar estos aparcacoches ilegales. Este proyecto aún no está cerrado pero sí contempla ya Protección Civil y la empresa pública de limpieza como destinos seguros para los gorrillas que no puedan hacer frente a las multas. A estos dos departamentos se les unirán posiblemente otros a medida que cobre forma este catálogo de sanciones, que está siendo elaborado por las delegaciones de Movilidad y Seguridad, Asuntos Sociales y Familia y Hacienda.

El Ayuntamiento de Sevilla ha puesto en marcha un plan contra los gorrillas que consiste en incrementar la presencia policial en las zonas más afectadas por este problema y multar a los aparcacoches por una infracción a la llamada ordenanza antivandálica. Esta norma municipal, que entró en vigor en el año 2008 pero que hasta ahora había tenido efectos nulos, castiga la práctica de exigir dinero a cambio de señalar lugares para aparcar con multas de hasta 120 euros.

Desde hace unas semanas, la Policía ha incrementado sus multas contra los gorrillas. Los agentes tienen órdenes también de intervenir la cantidad que porta el aparcacoches en el momento de la multa, puesto que se entiende que este dinero ha sido obtenido mediante una actividad ilícita.

Iniciativas como ésta habían fracasado anteriormente por la dificultad para que los aparcacoches paguen sus multas. La mayoría de ellos son personas indigentes, sin domicilio conocido ni propiedades que se le puedan embargar, que pueden declararse insolventes para evitar pagar la multa. Por ello, el Consistorio permite que se puedan canjear estas sanciones por trabajos en beneficio de la comunidad. El plan que está preparando el Ayuntamiento contemplará la inclusión de los gorrillas multados en Protección Civil y Lipasam. El primero de estos departamentos ya ha sido destino en anteriores ocasiones de personas condenados por delitos como malos tratos y contra la seguridad vial.

Entre las funciones de Protección Civil destacan el apoyo a la Policía Local en los dispositivos de grandes eventos como las fiestas de primaveras, conciertos y otros actos en los que se prevea una masiva asistencia de personas. Además, los voluntarios de este departamento municipal suelen colaborar en la regulación del tráfico en determinados puntos de la ciudad en los que se necesiten muchos efectivos para cortar varios cruces, como ocurre con las carreras populares o las procesiones. Los voluntarios también han apoyado a los Bomberos en incendios en los que se requiera una asistencia y apoyo a las víctimas y una presencia en la zona para reforzar el trabajo de los Bomberos, nunca para intervenir directamente en los fuegos.

En cuanto a la empresa municipal de limpieza, los responsables de la misma todavía no han decidido cuáles pueden ser las funciones que desempeñen los gorrillas insolventes. Aquí el capítulo de actuaciones es incluso mayor que el de Protección Civil, puesto que los aparcacoches pueden utilizarse para colaborar en las tareas de limpieza puramente dichas y para otros trabajos más laboriosos como la retirada de pintadas.

Mientras el Consistorio estudia en qué otras áreas se pueden incluir a los aparcacoches insolventes, la Policía Local continúa multando a todos aquellos gorrillas a los que sorprenden pidiendo dinero a cambio de indicar una plaza de aparcamiento. Desde el pasado verano se ha reforzado la presencia policial en Bami, una de las zonas tradicionalmente afectadas por este problema, y no sólo se han multado a los aparcacoches, sino que también a algunos se les ha abierto diligencias por amenazas a conductores que se han negado a entregarles dinero.

stats