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Cuando la gaviota se impone a la rosa

Los ediles populares son mayoría, una tendencia que se consolida, pero que no siempre ha sido así

Cuando la gaviota se impone a la rosa
J. Parejo

13 de agosto 2015 - 05:03

Aunque Espadas quiera restarle protagonismo a la parte que le toca, las representaciones civiles en la procesión del 15 de agosto son uno de los hechos más comentados por el público una vez que pasa la Virgen. Detrás de la Patrona no sólo forma la Corporación municipal de Sevilla, también lo hace la Diputación Provincial, gracias a que la Virgen de los Reyes extiende su patronazgo más allá de la capital. El Cabildo también invita a representantes del Gobierno de España, de la Junta de Andalucía, del Ejército, la Policía y los poderes judiciales. El desfile de los concejales sevillanos en la procesión viene de muy antiguo, como también lo hacen, por ejemplo, en el Corpus. En los últimos años, la balanza se ha decantado muy a favor del Partido Popular en detrimento del PSOE. Pero no siempre ha sido así.

Alfredo Sánchez Monteseirín participó durante 21 años en la procesión: nueve como diputado provincial y doce como alcalde de Sevilla. En su estreno como primer edil, en 1999, no acudieron los dos alcaldes anteriores: Rojas-Marcos (PA) y Soledad Becerril (PP) que, además eran portavoces de sus grupos. De hecho, el aldalucista sólo acudió mientras fue alcalde. El cortejo lo formaron 11 concejales del PSOE, 8 del PP y cinco del PA. Los dos ediles de IU no participaron, como es habitual también ahora.

El número de ediles disminuyó bastante dos años después. En 2001, sólo 14 de los 33 concejales acompañaron a la Virgen en su procesión anual. Los populares fueron mayoría en esa ocasión. En 2003, año de la primera reelección de Monteseirín, el número de participantes quedó lejos del estreno de 1999: 16. Un año después, sólo tres concejales del gobierno local desfilaron en el cortejo: el alcalde, Sánchez Monteseirín; el delegado de Fiestas Mayores, Gonzalo Crespo; y el delegado de Bienestar Social, Antonio Rodríguez Galindo.

En 2005 se dio un hecho inusual. Ningún representante de la Diputación Provincial acudió, pero sí lo hicieron sus maceros, que desfilaron en solitario. El cortejo popular fue más numeroso que el socialista, algo que se mantuvo en los años posteriores. Dos años más tarde Zoido ganó las elecciones pero no pudo formar gobierno. En su estreno con la Patrona el PP aportó 12 concejales por 8 del PSOE. Un año más tarde, el PP mantuvo su representación, mientras que sólo tres ediles representaron al gobierno: Montesirín, Rosamar Prieto-Castro y Alfonso Mir.

En 2011, ya con Zoido como alcalde, el PP se dio un auténtico baño de masas. Acudió con sus 20 ediles más el delegado no electo, Demetrio Cabello, que figuró tras el alcalde de traje y no con chaqué. La representación del PSOE fue paupérrima: su portavoz, Juan Espadas, y Eugenio Suárez Palomares. Durante sus cuatro años de mandato, Zoido ha mantenido la representación popular muy próxima al pleno: 18 ediles en 2012, 19 en 2013 y 19 el año pasado. Por contra, Espadas ha estado acompañado por sus fieles Juan Carlos Cabrera, actual delegado de Fiestas Mayores, Miguel Bazaga y Alberto Moriña.

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