Las estaciones del Cercanías de Sevilla: el 76,5% son plenamente accesibles

La evolución de las estaciones del Núcleo de Cercanías de Sevilla nos deja imágenes muy distintas a las de aquel 1991 de los inicios. Hoy, lo más destacado es que la gran mayoría de las estaciones son accesibles a personas con todo tipo de movilidad, concretamente un 76,5%. Este era uno de los objetivos principales de Renfe, cuyo último plan de accesibilidad es de 2009. Era el año en que se inauguró la línea 1 del Metro de Sevilla.

Renfe aclara que son 8 las estaciones que quedan por ser accesibles plenamente: Brenes y Guadajoz (ambas son accesibles solo al 50%), Cantillana, Palacio de Congresos (era accesible desde su inicio pero no actualmente por un problema en el terreno que ha modificado la situación original del andén), Cazalla/ Constantina, Pedroso, Tocina y Villanueva del Río y Minas. En todos los casos Adif tiene pendientes obras para revertir esta situación.

En innovación, otro hito en estos 30 años sucede en 2005 con la creación del Centro de Información y Control (CIC), el núcleo de operaciones desde donde se controlan telemáticamente todas las operaciones y el servicio al cliente: megafonía telemandada, registro y comunicación de incidencias, gestión de recursos de toda la red, coordinación de operaciones con maquinistas, etc.

En cuanto a los tornos o canceladoras, que son indispensables para integrar el Cercanías en la tarjeta del Consorcio Metropolitano de Transportes de Sevila, Renfe recalca que están instalados en todas las estaciones, salvo en cuatro de la C-3: Cazalla, El Pedroso, Villanueva del Río y Minas, y Tocina.

En la actualidad el Cercanías cuenta con 5 líneas y 33 estaciones: C-1 (Utrera-Lora del Río-Las Cabezas-Lebrija), que es la que concentra más viajeros; C-2 (Cartuja-Santa Justa), C-3 (Cazalla-Constantina-Santa Justa), el circular C-4 (de Santa Justa al Palacio de Congresos y Padre Pío/Palmete) y C-5 (Benacazón-Santa Justa-Jardines de Hércules).

El funcionamiento de la línea C-4 en un solo sentido es una de las cuestiones más criticadas. Renfe responde que tomó la decisión “por eficiencia en el servicio, al observar que los trenes sentido Santa Justa-San Bernardo de la C-4, que funciona con 34 trenes diarios, contaban con una demanda escasa al tratarse de un tramo con una oferta muy amplia (servido también por la C-1 y C-5)” y que “los trenes se mantuvieron en el sentido Santa Justa-Palacio de Congresos por ser donde había más demanda”. Renfe mantiene que esto no impide a los viajeros de Palacio de Congresos o Padre Pío (estaciones exclusivas de la C-4) la comunicación con el resto de la estaciones “en un tiempo máximo de 20 minutos de trayecto”.

Renfe trabajó por la modernización de estaciones e instalaciones, y por incorporar nuevas funcionalidades y servicios a la red. En la primera década del siglo XXI se instalaron los tornos de acceso en las estaciones, máquinas autoventa de última generación, venta por Internet, indicadores telemáticos de información al viajero en tiempo real y nueva megafonía telemandada en todas las estaciones.

En 1992 se incorporan las estaciones de Virgen del Rocío, San Bernardo y la de Cartuja, puerta de entrada al recinto de Expo 92. En 1995 se remodelan las estaciones de Dos Hermanas y Lora del Río y, tres años después, se incorpora la estación de Bellavista, entonces con montacargas para llevar entre andenes a personas con movilidad reducida. La apertura de Bellavista y luego Jardines de Hércules y San Jerónimo permitió al Cercanías ampliar su servicio urbano, donde empezó con 4 estaciones y hoy alcanza la decena dentro de la ciudad.