Entra en vigor el nuevo registro de viajeros: ¿Cómo impacta al sector turístico de Sevilla?
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El turismo en Sevilla, una de las principales joyas culturales y económicas de España, se enfrenta a un nuevo desafío. A partir del 2 de diciembre de 2024, entra en vigor el nuevo registro de viajeros, una normativa que obliga a los alojamientos y servicios de alquiler de vehículos a motor a recopilar y comunicar datos exhaustivos de sus clientes a las autoridades.
Este cambio, regulado por el Real Decreto 933/2021, busca reforzar la seguridad ciudadana, pero también genera controversias en el sector turístico.
¿Qué es el registro de viajeros y por qué es importante para Sevilla?
El registro de viajeros es un sistema mediante el cual los alojamientos, tanto hoteles como viviendas de alquiler turístico, están obligados a registrar información detallada de sus clientes.
Este proceso incluye datos personales, información sobre el medio de pago, y detalles del contrato o la reserva.
El objetivo principal es colaborar con las autoridades en la prevención de delitos, mejorar la seguridad y garantizar el cumplimiento de normativas.
Sevilla, como destino turístico emblemático, con casi tres millones de visitantes anuales, es uno de los puntos más afectados por esta normativa. Con reconocidos monumentos como la Giralda, el Alcázar o la Plaza de España, la ciudad no solo atrae a turistas, sino también a viajeros internacionales que a menudo prefieren alojarse en viviendas vacacionales gestionadas por particulares o plataformas digitales.
El impacto del registro de viajeros en Sevilla es significativo, ya que estas plataformas representan una parte importante del mercado. Además, las pequeñas empresas locales, como hostales y apartamentos turísticos, enfrentan nuevos retos administrativos y financieros.
Requisitos de la normativa: ¿Qué implica para los negocios turísticos en Sevilla?
A partir de la fecha de entrada en vigor, los alojamientos sevillanos deberán recopilar los siguientes datos:
- Información del establecimiento o anfitrión: Nombre comercial, NIF/CIF, dirección, correo electrónico y enlace a plataformas de reserva.
- Datos del viajero: Nombre completo, documento de identidad, nacionalidad, lugar de residencia, teléfono y correo electrónico.
- Detalles de la transacción: Número de reserva, fechas de entrada y salida, método de pago y ubicación del inmueble.
Estos datos deben enviarse diariamente a una plataforma gestionada por el Ministerio del Interior. En caso de incumplimiento, los propietarios podrían enfrentarse a sanciones económicas que oscilan entre los 600 y los 30.000 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción.
Impacto en los turistas y en la economía local
El turismo es un motor clave para la economía sevillana. Los visitantes internacionales generan ingresos significativos en alojamiento, gastronomía, transporte y ocio. Sin embargo, la implementación del registro de viajeros podría cambiar la percepción de Sevilla como destino acogedor.
Algunos turistas, especialmente aquellos procedentes de países con estrictas leyes de privacidad, podrían mostrarse reacios a compartir información tan detallada. Esto podría traducirse en una disminución de las reservas, especialmente en el segmento de viviendas turísticas, que ya enfrenta críticas por su impacto en la gentrificación y los precios del alquiler.
¿Cómo afecta esto a la experiencia del viajero?
Aunque la normativa está diseñada para mejorar la seguridad, los viajeros podrían experimentar una experiencia más burocrática. El proceso de check-in podría alargarse en algunos casos, y la solicitud de información adicional podría percibirse como invasiva.
Sin embargo, los expertos señalan que estas medidas son comunes en otros destinos europeos y que, con el tiempo, los turistas podrían adaptarse. Además, Sevilla sigue destacando por su hospitalidad, riqueza cultural y oferta gastronómica, factores que podrían mitigar cualquier inconveniente inicial.
Mientras que la intención de reforzar la seguridad es ampliamente reconocida, los retos operativos y las implicaciones para la privacidad generan incertidumbre.
La Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) manifestó que la normativa, al requerir la recopilación de hasta 31 datos personales de los viajeros, podría vulnerar derechos fundamentales de privacidad y complicar la experiencia de millones de visitantes que eligen España como destino.
Por su parte, expertos en ciberseguridad han alertado sobre los riesgos que esta normativa supone para la privacidad de los turistas, al obligarles a proporcionar datos sensibles durante su registro en alojamientos o al alquilar vehículos.
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