El autor del doble atropello se enfrenta a una condena mínima de cinco años
La Fiscalía le imputa en principio dos delitos de homicidio imprudente, en concurso con otro contra la seguridad del tráfico, pero no por omisión del deber de socorro porque no está acreditado que intentara darse a la fuga
Cinco años de cárcel como mínimo. El autor del doble atropello mortal en el Paseo de Colón podría ser condenado a esta pena de prisión si es hallado culpable por el jurado que deberá enjuiciar este caso. La Fiscalía de Sevilla imputó inicialmente a Fernando Vargas, el joven que conducía el Renault Clio en el que viajaba Adrián del Nido -hijo del abogado y presidente del Sevilla F. C., José María del Nido-, dos delitos de homicidio por imprudencia, en concurso con un delito contra la seguridad del tráfico.
El Código Penal castiga el homicidio imprudente con penas que van de uno a cuatro años, pero como la conducta se ve agravada por el delito contra la seguridad del tráfico -circulaba, a falta de los informes periciales, a una velocidad de entre 90 y 110 kilómetros por hora en una vía limitada a 50 y dio positivo en el test de alcoholemia- el Ministerio Público tendría que solicitar una pena que abarcara la mitad superior de lo que prevé el Código Penal: dos años y medio por cada delito.
El conductor del Renault Clio que protagonizó el accidente tenía además retirado el carné de conducir, al haber perdido todos los puntos del permiso, por lo que también puede imputársele un delito de quebrantamiento de medida cautelar, aunque este caso la pena que llevaría aparejada sería una multa de 12 a 24 meses. Fernando V. C. había perdido todos los puntos de su permiso precisamente por haber dado positivo en distintas pruebas de alcoholemia y la retirada de su carné de conducir estaba en vigor.
La Fiscalía de Sevilla no ha imputado, al menos por ahora, un delito de omisión del deber de socorro al conductor porque, según explicaron ayer fuentes del Ministerio Fiscal, de ninguna de las manifestaciones que han prestado los testigos se desprende que el joven intentara darse a la fuga tras el atropello de las dos víctimas.
Sin embargo, la versión con la que ha trabajado la Policía Local desde la misma noche del sábado al domingo es la de que el conductor trató de huir siguiendo su camino por el Paseo de Colón y que sólo se detuvo cuando vio que un taxi y un patrullero de la Policía Local le impedían la fuga atravesados en la avenida a la altura de la plaza de toros de la Maestranza. En su declaración ante la juez de Guardia durante la noche del domingo, el conductor aseguró que pasó con el semáforo en verde para él, que detuvo su vehículo en el momento en que se lo permitieron los hitos que delimitan el carril reservado para los taxis y que no lo hizo antes porque podía provocar otro accidente y que no vio a tiempo a las dos jóvenes, que, según él, se echaron encima del vehículo.
El fiscal de Seguridad Vial de Sevilla, Luis Carlos Rodríguez León, explicó ayer a este periódico que fue informado del accidente la misma madrugada en que se produjo y no descarta que asuma el ejercicio de la acusación pública en este caso.
Los familiares pudieron enterrar ayer a las víctimas de este doble atropello, Almudena González y Patricia Alfaro. La primera de ellas había invitado a la segunda, residente en Madrid, a pasar la Semana Santa en Sevilla. Ambas se acababan de bajar de un taxi en el que viajaban en compañía de una tercera amiga y cruzaron con el semáforo en verde para los peatones según los testigos. Se dirigían hacia una estación de Metro para regresar a casa de Almudena, en Mairena del Aljarafe. El novio de Patricia, que viajaba en un segundo taxi, presenció el atropello y sufrió una fuerte de crisis de ansiedad. La pareja tenía previsto contraer matrimonio el próximo mes de septiembre. Familiares de Patricia se desplazaron el domingo desde Madrid para hacerse cargo del cuerpo.
72 Comentarios