Diez años sin la Duquesa de Alba

Un sentido recuerdo a una de las figuras más imprescindibles y emblemáticas de la Sevilla moderna. El santuario del Señor de la Salud y la Virgen de las Angustias ha acogido este miércoles una misa en sufragio por el alma de la Duquesa de Alba. Familiares y amigo de Cayetana Fitz-James Stuart se han reunido en el templo de los Gitanos en el décimo aniversario del fallecimiento de la aristócrata, tan recordada todavía en Sevilla. La eucaristía ha reunido a tres de los hijos varones de la duquesa, con el actual duque, Carlos Fitz-James Stuart, al frente, quien acordó la celebración junto a Cayetano Martínez de Irujo, quien se ha encargado hasta ahora de las misas anuales en los Gitanos. Les acompañó Fernando. No faltó Alfonso Díez, viudo de la duquesa, ni amigos como Curro Romero y Carmen Tello.

Cayetana Fitz-James Stuart falleció en Sevilla el 20 de noviembre de 2014 a los 88 años de edad al agravarse su estado de salud. La duquesa había ingresado unos días antes ingresó en la clínica Quirónsalud Sagrado Corazón afectada por una gastroenteritis, una afección respiratoria causada por una neumonía y una arritmia cardiaca. Después de que los partes médicos apuntasen que su situación se había estabilizado, fue trasladada a la Casa de las Dueñas, donde finalmente falleció. 

Las cenizas de la Duquesa de Alba se depositaron al día siguiente de fallecer junto al Señor de la Salud y la Virgen de las Angustias. Donde ella quería. Bajo el techo que ella misma contribuyó a levantar para su querida hermandad. Los restos de la duquesa fueron colocados entonces en una de las capillas laterales del templo tras una lápida de mármol blanco con los escudos de la hermandad y de la Casa de Alba en la que se podía leer: “Aquí reposan las cenizas de nuestra hermana Doña Cayetana Fitz-James Stuart y Silva. Duquesa de Alba. Camarera de honor de María Stma. de las Angustias, medalla de oro y gran benefactora de esta Hermandad de los Gitanos, gracias a cuya contribución y ayuda fue posible la reconstrucción de este Santuario. Estará por siempre en la memoria de nuestra hermandad. 1926-2014”.

Coincidiendo con el tercer aniversario de la muerte fue inaugurado el monumento funerario en mármol realizado por el escultor José Antonio Navarro Arteaga.