Día Mundial de la EPOC: un 8% de la población en Sevilla padece la enfermedad
Neumólogos de los hospitales Quirónsalud en Sevilla alertan de que el infradiagnóstico de la enfermedad roza el 75%
Aducen que se debe, principalmente, a que los pacientes desconocen sus síntomas y no acuden al especialista
¿Cuál es la principal causa de la EPOC que dificulta su diagnóstico?
Especialistas de los hospitales Quirónsalud en Sevilla -Quirónsalud Infanta Luisa y Quirónsalud Sagrado Corazón-, con motivo del Día Mundial de la lucha contra la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), este 20 de noviembre, han apuntado que la enfermedad presenta "un importante infradiagnóstico del 74,7% en España -70,4% en varones y 80,6% en mujeres- debido a que los síntomas son subestimados por los pacientes y normalmente se diagnostica en estadios avanzados".
En Sevilla, según los datos del último estudio epidemiológico la EPOC la padece el 8,1% de la población.
Del mismo modo, el coordinador del servicio de Neumología del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, Domingo García Aguilar, ha detallado en una nota que el espectro sintomático de la EPOC "es muy amplio, encontrando pacientes completamente asintomáticos". Entre los principales síntomas existen "tos, expectoración, disnea o sibilancias que son inespecíficos, ya que aparecen en cualquier paciente fumador, de ahí a que muchas veces la patología se diagnostique años después de iniciarse o incluso que haya un elevado porcentaje de pacientes sin diagnosticar", ha destacado García Aguilar.
En este sentido, ante el desconocimiento sobre la enfermedad y la falta de diagnóstico, el jefe de servicio de Neumología del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, Jesús Peñas de Bustillo, ha aconsejado "evitar que la población normalice la presencia de síntomas respiratorios en especial la existencia de tos o falta de capacidad pulmonar solo por el hecho de ser fumadores o por estar en baja forma, así como trabajar por generalizar el uso de espirometrías en pacientes fumadores".
Asimismo, el uso de fármacos broncodilatadores por vía inhalada constituye la base del tratamiento de los pacientes con EPOC en las diferentes fases de la enfermedad. Así, el doctor Peñas de Bustillo ha destacado que "el tratamiento farmacológico constituye solo una parte del tratamiento, que debe de ser complementada con intervenciones no farmacológicas, que han demostrado disminuir la mortalidad en relación con el cese del tabaquismo, rehabilitación pulmonar, oxigenoterapia a largo plazo, ventilación mecánica no invasiva y técnicas quirúrgicas".
De esta forma, "en pacientes muy seleccionados con enfisema avanzado se ha observado que técnicas broncoscópicas de reducción de volumen mejoran la tolerancia al ejercicio, calidad de vida y función pulmonar a los seis a doce meses de seguimiento y, probablemente, en poco tiempo existan tratamientos biológicos para determinados pacientes", ha añadido Jesús Peñas de Bustillo.
El tabaquismo "es el principal factor de riesgo de esta enfermedad, estando muy por debajo los contaminantes ambientales y laborales, el uso de biomasa o factores genéticos", ha señalado García Aguilar. "Entre el 70-90 % de las personas diagnosticadas de EPOC tienen antecedentes de tabaquismo" y las nuevas formas de tabaquismo, como los cigarrillos electrónicos, el vapeo y los dispositivos de tabaco calentado "están siendo objeto de estudio para entender su impacto en enfermedades pulmonares crónicas", ha añadido.
Igualmente, García ha subrayado que "aunque estos dispositivos suelen promocionarse como alternativas menos dañinas al tabaquismo convencional, tienen efectos potencialmente perjudiciales para la salud pulmonar". Si bien, "algunos dispositivos podrían tener menos riesgos inmediatos en comparación con el tabaco convencional, pero en personas con EPOC, estas nuevas formas de tabaquismo podrían agravar la enfermedad, y en no fumadores podrían contribuir a su desarrollo", han desarrollado. La mejor recomendación es "evitar cualquier forma de consumo de nicotina y productos inhalables para proteger la salud pulmonar", ha apostillado García Aguilar.
En este sentido, los expertos han coincidido que el paciente fumador con EPOC "tiene más riesgo de cáncer de pulmón que el fumador que no sufra esta enfermedad, por la posible relación entre los mecanismos oxidativos y los antioxidantes, que se expresan diferencialmente en estos pacientes con enfermedades crónicas respiratorias".
No obstante, estos pacientes no solo están más predispuestos a desarrollar un cáncer de pulmón, "si no también otras enfermedades como patologías cardiovasculares, respiratorias, diabetes mellitus, obesidad, desnutrición, insuficiencia renal, osteoporosis, enfermedades psiquiátricas, deterioro cognitivo, reflujo gastroesofágico, anemia o neoplasias", han señalado ambos especialistas.
Finalmente, los expertos han hecho hincapié en el recordatorio de que "la EPOC es una enfermedad crónica progresiva, en la que, además de la terapia con broncodilatadores de forma mantenida y la correspondiente vacunación preventiva, resulta fundamental la realización diaria de ejercicio físico unido al abandono del tabaco", han concluido.
Temas relacionados
No hay comentarios