Cuenta atrás para la apertura de la calle Zaragoza

Los operarios trabajan estos días a destajo para que la céntrica vía pueda reabrir antes de diciembre

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Los operarios trabajando en el cruce con Doña Guiomar. / Juan Carlos Muñoz

Una actividad frenética. La calle Zaragoza afronta la cuenta atrás para su esperada reapertura. Esta céntrica vía, vital para el buen discurrir de la circulación en el entorno de la Magdalena y la Plaza Nueva, encara los últimos días de trabajo. Actualmente, la calle se encuentra terminada, a falta de recibir los árboles y otros retoques, entre el cruce de San Pablo y la llegada a la confluencia con Doña Guiomar. Desde este punto que conecta con la plaza de Molviedro, los operarios continúa colocando los adoquines, tarea que se encuentra bastante encarrilada. El Ayuntamiento comunicó a este periódico que la apertura sería a finales de este mes de noviembre. En cualquier caso, la calle debe estar abierta para el próximo Plan de Tráfico de Navidad.

Tras unas obras que arrancaron después de la Semana Santa y que, en su primera fase, se anunció que estarían en agosto, los vecinos y comerciantes de la calle Zaragoza empiezan a ver la luz. También las muchas personas que acuden al centro por ocio o trabajo en sus vehículos para dejarlos en los aparcamientos de San Pablo o Albareda. Desde hace unas semanas Zaragoza luce su nuevo aspecto en prácticamente la mitad de la calle. La finalización de este importante tramo ha permitido que se retome la movilidad peatonal. 

El cruce de Zaragoza con la calle San Pablo ya terminado / Juan Carlos Muñoz

Precisamente la necesaria obra de Zaragoza ha provocado importantes problemas de movilidad en el entorno de la Plaza Nueva. Al eliminarse esta calle como punto de acceso, el Ayuntamiento ha tenido que remodelar y adaptar toda la circulación para posibilitar la entrada y salida de los coches. Con ello se han generado importantes atascos, ya que la única manera de salir de los aparcamiento y del entorno de la Plaza Nueva es a través de calles estrechas del Arenal como Harinas.

Los trabajos se centran ahora mismo en el tramo que discurre entre Doña Guiomar y la confluencia con la calle Madrid. La colocación del pavimento va a buena velocidad, pese a la lluvia de los últimos días, por lo que es previsible que se concluya la tarea en pocos días. Los mayores esfuerzos se centran en el cruce de la calle Madrid. Aquí todavía no se empezado a poner la solería y se trata de un punto importante para que se pueda acceder a la Plaza Nueva. 

Situación en la que se encuentra el cruce con la calle Madrid. / Juan Carlos Muñoz

Nuevos árboles de sombra

La terminación de gran parte de la intervención que Emasesa acomete en la calle Zaragoza muestran una calle con una estética renovada que ha eliminado las estrechas aceras y que es mucho más amable para el peatón. La recuperación del adoquín tradicional de Gerena en la calzada luce especialmente. Además, destacan los bordillos de granito rojo, que se han mantenido; y la calle central de la plataforma única en granito de tonalidad rojo de Monforte.

También son visibles ya los nuevos alcorques en diferentes puntos en los que se plantarán árboles de sombra. Se incluyen especies como séforas (styphnoloboum japonica) y árbol del amor (cersis siliquastrum). Además, se conservarán y protegerán los naranjos existentes al final de la vía, enriqueciendo el entorno urbano. También se mantendrán el aparcamiento para personas con movilidad reducida y los destinados a motocicletas.

Personas pasean por el tramo central de la calle. / Juan Carlos Muñoz

Una vez finalizada esta fase, los trabajos continuarán hasta el tramo que conecta con la calle Jimios. Esta actuación estará terminada antes de la Semana Santa. Los trabajos desarrollados por el Ayuntamiento, a través de Emasesa, para la renovación integral de las redes de agua la reurbanización de la calle cuentan con un presupuesto de 2.105.763. 

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