La incidencia en los adolescentes sevillanos cae a la mitad en apenas 10 días

Al igual que se disparó en apenas unas semanas a principios de verano, la tasa de incidencia del coronavirus entre los jóvenes sevillanos ha iniciado ahora una importante tendencia a la baja. En apenas 10 días, la tasa de contagios en este sector de la población ha caído a más de la mitad, a pesar de que en el global de los positivos detectados en los últimos 14 días en la provincia, el 40% sigue teniendo menos de 29 años.

El pasado 31 de agosto la incidencia en el grupo de entre 15 a 19 años se disparaba y, por primera vez e toda la pandemia, superaba a la de los veinteañeros con hasta 683,5 casos por cada 100.000 habitantes. Sin embargo, el dato aportado ayer por la Consejería de Salud en su portal estadístico reduce notablemente esta cifra hasta dejarla en 245,1, lo que supone un 64% menos. Desde mitad de agosto, y en los 14 días anteriores, se habían contagiado 739 sevillanos con estas edades; ahora, en las últimas dos semanas, que es el periodo que se utiliza para calcular la tasa de incidencia y la propia evolución de la enfermedad, ha bajado hasta los 265 afectados.

Ahora, aunque la comparativa del avance en la vacunación con la evolución de este indicador no es exacta ya que los datos recogidos la web del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía no se distribuyen según las mismas franjas de edad, el 58% de los jóvenes de entre 12 y 19 años ya tienen la pauta completa, aunque hay que tener en cuenta que los efectos de la vacuna tardan unos días desde que se pone. El 81,4%, por su parte, ya tiene una dosis puesta, lo que es un notable avance que explica esa caída de la incidencia gracias a los efectos de la vacunación entre la población adolescente.

Este grupo de edad ha sido el protagonista de la primera parte de la quinta ola de la pandemia. Mientras que sus mayores estaban vacunados con una dosis o con la pauta completa, los más jóvenes entraban en la temporada de verano sin ningún tipo protección médica y manteniendo sólo la personal: la mascarilla, para aquello que si tenían asumido que debían llevarla. A partir de ahí, los datos de contagios se fueron disparando, especialmente por la variante Delta que se ha extendido a buena parte de los nuevos enfermos, y aumentado la incidencia en el resto de sectores de la población, en una segunda etapa de la quinta embestida de la pandemia, en la que los mayores, sobre todo los residentes en centros de ancianos, se han vuelto a situar en el punto de mira.

Tal es así que la variante delta también ha afectado a grupos de edad que ya tenían la pauta completa de la vacunación. Así, entre los mayores de 65 años, que según la Junta ya están vacunados al 100%, se han detectado en estos 14 días 326 casos. Aquí es donde, lamentablemente, se ha producido un aumento en los fallecimientos durante el mes de agosto, respecto a los datos de junio y julio donde la mortalidad descendió de forma notable, con especial incidencia en la población residente en geriátricos y centros de mayores donde el virus se ha cobrado una treintena de vidas en las últimas semanas.

Por otro lado, en el grupo entre 0 y 14 años de edad la quinta ola también está dejando a muchos afectados. Aquí, igualmente, el descenso en las últimas dos semanas es evidente. Así, el pasado 31 de agosto la tasa se elevaba a 364 mientras que ahora se queda en 181,6, el 51% menos. Afortunadamente en este grupo de edad no ha habido que lamentar ningún fallecimiento desde el inicio de la pandemia.

La tasa provincial se acerca al riesgo medio

Con todo, el curso escolar arranca hoy con una caída notable y generalizada de los contagios en toda la población en la provincia de Sevilla.Tras el pico de mediados de agosto, el impacto del virus remite y cada día hay menos casos activos, hospitalizaciones o incidencia acumulada. Hoy la tendencia se mantiene. La Consejería de Salud ha informado de 148 contagios más de Covid-19 detectados mediante pruebas PCR y test de antígenos, casi medio centenar menos que los notificados ayer. Por desgracia, no ocurre lo mismo si nos referimos al número de fallecidos, ya que si bien es cierto que hoy no se han comunicado muertes causadas por la enfermedad en la provincia, ya son 2.226 las personas que han muerto por Covid, de las que 189 han tenido lugar en esta última embestida.

Según la última actualización del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IEA), la incidencia acumulada es el principal indicador de esa progresiva retirada de la quinta ola. Tras encadenar un mes a la baja, este jueves se sitúa muy cerca del nivel de riesgo medio, que marcan los 150 casos por 100.000 habitantes. En concreto, en sólo siete días ha pasado de 270,5 casos por cada 100.000 habitantes a 154,7, un descenso de algo más de 115 puntos. Han pasado más de cinco meses desde que la provincia de Sevilla se encontraba en una cifras similares. De hecho hay que remontarse al 6 de abril, en los inicios de la cuarta ola, para localizar una tasa de contagios similar a la actual: 153,1.

En los hospitales, por su parte, hoy hay tres camas menos ocupadas con pacientes Covid, 166 en total. Y de ellas, 37 están en la UCI, una más que ayer. En cualquier caso, el reguero de ingresos hospitalarios no para y, según la última actualización de datos de la Consejería de Salud y Familias, en las últimas horas se han registrado 11 hospitalizaciones en los centros sevillanos. Desde que comenzó la pandemia, un total de 12.364 personas han necesitado hospitalización y 1.209 han requerido cuidados críticos.

Respecto a los curados, Salud ha tramitado 1.200 altas epidemiológicas desde ayer. Con ellas, ya son 158.071 los ciudadanos que se han recuperado del coronavirus, aunque algunos sigan sufriendo sus secuelas. Con estos datos, en la provincia hay 13.086 casos activos de Covid-19, o lo que es lo mismo, son personas que pueden transmitir la enfermedad.