¿Cómo prepararse para profesiones que no existen?
Formación y nuevas tecnologías
Se estima que el 65% de los niños que ahora cursan Primaria ejercerán un trabajo que aún no se ha creado
El desarrollo de competencias digitales y STEM, la capacidad de aprender en nuevos entornos y trabajar en equipo son claves
Luis Miguel Olivas, director de Campus 42Madrid, recomienda a los padres "empujar y abrazar el cambio"
¿Cómo prepararse para profesiones que se demandarán en unos años pero que no existen? Es la gran pregunta que se hacen miles de jóvenes, inmersos en una formación reglada como hace décadas, docentes y padres y a la que se ha intentado responder este viernes en una de las mesas más interesantes de las programadas en la VI Feria de la Innovación y las Nuevas Tecnologías, que se celebra en la Diputación.
Con un auditorio adolescente, el reclamo ha sido el youtuber e instragramer Paul Ferrer, @mrpaulferrer: 23 años y 1,37 millones de suscriptores. Aunque las claves las ha dado Luis Miguel Olivas, ingeniero de telecomunicaciones, director de Empleabilidad e Innovación Educativa de la Fundación Telefónica y del Campus 42Madrid, un método de formación para profesionales digitales y programadores expertos, que trabaja con esa perspectiva y que está arrancando en España. En Andalucía tendrá sede en Málaga.
Es significativo que no exija titulación previa, que sea gratuito. Sólo hay que tener cumplidos 18 años y superar un test online y una inmersión de 26 días en una "piscina" -así se llama esa etapa- en la que se evalúa "la capacidad de aprender, la tolerancia a la frustración, el trabajo en equipo...". No hay profesores, se basa en el autoaprendizaje y en la colaboración para resolver retos. Sí hay exámenes, de hasta ocho horas. En los países en los que funciona, con centros sin horario fijo pero abiertos 24 horas 365 días al año para que cada cual vaya a su ritmo, logra un 100% de inserción laboral.
Olivas ha invitado a los estudiantes a preguntarse qué quieren ser de mayores cuando todo está cambiando a una velocidad de la que no somos conscientes y ha hablado de competencias digitales y STEM (ciencias, tecnología, ingeniería, matemáticas), habilidades para trabajar en equipo y capacidad para hablar en público, expresar ideas y tener "visibilidad".
Conocimientos y habilidades, pero sobre todo actitud
Pidió al auditorio dibujar una flor y una casa y demostró que la mayoría traza una margarita y un tejado a dos aguas, como hemos aprendido a pesar de que vivamos en bloques. "Vamos perdiendo la creatividad con los años", ha lamentado. Les ha invitado a "romper los esquemas", a buscar "nuestra casa, nuestra flor diferente, nuestro valor diferencial...". Incluso a hacerlo en las entrevistas de trabajo.
"Los conocimientos y habilidades son importantes y suman pero lo que multiplica es vuestra actitud", ha dicho. Es cuestión de actitud, con c, no de aptitud, con p, ha puesto el acento. "Gente como Paul -en referencia al youtuber- se atrevió a hacerlo".
Olivas ha ilustrado al auditorio con fotografías. Una de dos aulas universitarias con 37 años de diferencia y la misma posición del alumnado sobre el folio. "¿Qué nos decían para tener un trabajo? Estudia inglés, una carretera, saca buenas notas". Pero el 33% de los jóvenes en España están en situación de desempleo y hay puestos de perfil digital que no se cubren.
¿Qué pueden hacer los padres para preparar a sus hijos dada la falta de adaptación de los colegios a la realidad? El 65% de los niños que ahora cursan Primaria ejercerán un trabajo que todavía no existe.
La educación tiene que cambiar
"La educación tiene que cambiar, es responsabilidad de los centros, de las instituciones públicas y de los padres", a los que aconseja "empujar y abrazar el cambio". Si éste se resiste en los colegios, en su mano está hacer cosas "en paralelo", fomentar esa actitud necesaria con actividades de robótica -como la que se desarrollaba, al lado, en un taller de la feria-, "lluvia de ideas, invitarles a colaborar con otros, a salir al campo, no coartar su creatividad, que se diviertan aprendiendo, como debería ocurrir en la escuela".
Reconoce la dificultad de la tremenda brecha digital. Los padres se sienten "huérfanos", no saben cómo orientar a sus hijos en ese entorno digital que también representa un peligro en otros aspectos y está falto todavía de una "ética" propia. El 30% de los algoritmos se consideran "malignos". Advirtió a los chavales del problema de las fakes news.
Para los padres, "la clave es no intentar poner barreras al niños, sino acompañarles", interesarse y aprender con ellos. No hay límite de edad para eso. Para aprender a aprender.
En cualquier caso, no hay vuelta atrás. El director global de Campus 42Madrid puso fotografías de la sede ruinosa de Kodak, una empresa de 135 años y uno de cuyos empleados, al que tacharon de "loco", inventó la cámara digital. Recordó que el teléfono fijo tardó 75 años en tener 100 millones de usuarios; el móvil lo hizo en 16; internet, en 7; Whatsapp en tres, Instagram, en 2, Pokemon go, en 25 días.
También puso fotos de Waymo, empresa que a muchos ni les suena y está desarrollando un coche autónomo. En la actualidad tiene más valor de Tesla o General Motors. Necesita 100 veces menos piezas que un coche al uso, ¿qué pasará con los fabricantes?, ¿qué pasará con las empresas de señalética si el coche es capaz de orientarse? El 95% de los accidentes de tráfico son por fallos humanos, ¿alguien duda que no es más fiable un algoritmo?, ¿qué pasará con las empresas de seguros, con todas esas empresas y todos esos trabajadores? Se tendrán que reinventar, dijo. El cambio es la oportunidad.
El ojo avizor de Málaga
El programa 42 de la Fundación Telefónica tiene previsto abrir su única sede en Andalucía en Málaga. Lo hace en ese lugar porque, según ha explicado Luis Miguel Olías, director global del proyecto, desde que éste se presentó el pasado mes de septiembre en Madrid, el Ayuntamiento y el alcalde de Málaga en particular, Francisco de la Torre, contactó con ellos y ofreció todo tipo de colaboración y facilidades. Es el Consistorio el que pondrá la sede, la adaptación necesaria y el mobiliario en el edificio de la antigua Tabacalera, junto al denominado Polo de Contenidos Digitales. En el Campus de Madrid ya hay 21.000 inscritos. De media, la formación dura tres años, aunque depende del ritmo de cada alumno.
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