Clases 'on line' en Sevilla para días de alerta naranja
Educación
La experiencia de la pandemia ha servido para retomar la enseñanza telemática
El San Francisco de Paula es uno de los pocos colegios en los que la actividad docente se ha mantenido
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La pandemia del Covid supuso una gran lección para muchos colegios. El confinamiento los obligó a entrar de lleno en la era digital y a usar las nuevas tecnologías para mantener un mínimo de actividad académica. Algunos vieron en aquella crisis sanitaria una oportunidad para salir fortalecidos en enseñanza telemática. Otros se olvidaron de este formato en cuanto se recuperaron por completo las clases presenciales. El cierre de los centros educativos este jueves, a raíz de la alerta naranja por DANA, ha recordado la situación que se vivió en la primavera de 2020, motivo por el cual -en puntuales casos- se ha retomado lo que se hizo cuatro años antes. En cifras, han sido muy pocos, un grupo muy minoritario, donde de nuevo se ha apostado por el aprendizaje on line.
Así se ha hecho en el Colegio Internacional de Sevilla-San Francisco de Paula (SFP), donde, como en todas las escuelas, el aviso de la Consejería de Presidencia sobre la suspensión de las clases llegó a última hora de la tarde del miércoles, con los centros ya cerrados y muchos menores a punto de irse a la cama. La decisión tomada por el departamento que dirige Antonio Sanz -que ni la propia Consejería de Desarrollo Educativo y FP conocía- obligó a que el consejo de dirección del SFP mantuviera una reunión telemática de inmediato. "Jugábamos con el tiempo en contra, pues en la pandemia supimos tres días antes que el lunes 16 de marzo de 2020 se suspendían las clases", recuerda Luis Rey Goñi, director del colegio privado.
Tras ese encuentro, se habló con la asociación de madres y padres de alumnos del centro (AMPA) para informarles de la decisión tomada. Se intentaría mantener, en la medida de lo posible, la actividad académica en el San Francisco de Paula al día siguiente. Para ello, se recurriría a la enseñanza telemática, como ya se hizo en aquella fatídica primavera de 2020. Para esta comunicación, se envió un correo electrónico a las familias y también se avisó a los padres que ejercen de delegados a través de los grupos de whatsapp creados para este tipo de informaciones. Datos transmitidos, por cierto, en ocho idiomas.
Ordenadores en las aulas
Debe recordarse que en este colegio, a partir del último curso de la ESO, se emplean ordenadores portátiles para el aprendizaje. En concreto, en el Year10, que es el equivalente a cuarto de Secundaria en el programa internacional, para alumnos de 15 años. Una herramienta que se extiende al Bachillerato. El empleo de esta tecnología facilita que en tales circunstancias se puedan impartir clases on line, motivo por el cual se decidió apostar por la enseñanza telemática para una jornada como la de este jueves, con suspensión de la actividad docente para evitar desplazamientos.
Para sexto de Primaria y el resto de enseñanzas medias, el profesorado envió a los alumnos actividades a realizar mediante el sistema de comunicación interna Teams, del que también está dotado el centro. En las etapas previas se optó por paralizar durante un día el ejercicio docente.
El horario lectivo habitual
La sede física del San Francisco de Paula ha mantenido abiertas sus puertas hasta poco antes de las 13:00, con la intención de que algún padre recogiera el material tecnológico que se hubiera dejado allí el día anterior. En cifras, han recibido clases telemáticas 211 estudiantes (76 de Year10 y 135 de Bachillerato) desde las 8:30 hasta las 15:30, el horario lectivo habitual del colegio. Las han impartido 35 profesores. A ellos hay que sumar otros 300 alumnos del resto de la Secundaria, que han estado realizando las tareas enviadas por Teams.
Dispositivos tecnológicos y nuevas vías de comunicación que han permitido que en una jornada sin clases presenciales -por el alto riesgo de DANA- se mantenga la docencia y no se interrumpa el calendario académico por circunstancias sobrevevenidas. Un equipamiento, por otro lado, con el que el SFP contaba antes del Covid. “No es algo que se pueda improvisar de un día para otro”, matiza Luis Rey.
Lo vivido en la pandemia debe servir para que en situaciones como la de este jueves la enseñanza se mantenga a salvo. Algunos (pocos) colegios han aprendido la lección. En otros (la mayoría), se ha olvidado pronto.
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