El centro de salud de Los Bermejales sufre tres apagones desde septiembre por el robo de cables

El vandalismo y saqueo que sufre desde hace años el antiguo Hospital Militar Vigil de Quiñones está empezando a dejar graves efectos colaterales. Las víctimas de ellos son los miles de vecinos de Los Bermejales, Heliópolis y Reina Mercedes que desde el pasado mes de septiembre están viendo mermada su asistencia sanitaria en el centro de salud de Los Bermejales donde el robo de cables en el antiguo edificio provoca cortes totales de suministro eléctrico en este ambulatorio, ubicado en una parcela aledaña.

Así lo ha denunciado este lunes el vocal de Atención Primaria del Sindicato Médico de Sevilla y delegado de la zona, Andrés Jiménez, que, en declaraciones a este periódico, asegura que en la mañana de hoy los profesionales de este centro se han enfrentando al tercer apagón que sufre el centro de salud desde el pasado mes de septiembre. Jiménez ha explicado que a primera hora de este lunes el centro de salud estaba "totalmente a oscuras" y que el suministro no ha sido recuperado hasta pasadas unas cuatro o cinco horas aproximadamente y "a medias", ha denunciado. Según sus declaraciones, es la segunda vez que se da una circunstancia idéntica en menos de 15 días y la tercera desde el mes de septiembre. "Sufrimos el primer corte total de luz en septiembre y luego tuvimos otro el día 30 de diciembre. El de hoy se ha producido con poco más de diez días de diferencia", explica.

Desde el Sindicato Médico aseguran que han denunciado estos hechos en el Distrito Sanitario Sevilla y que la explicación que le dan en este órgano público que gestiona la zona y que además tiene su sede junto al Hospital Militar, es que esos cortes de luz se deben al robo de cables dentro de este viejo edificio. Un edificio que, aunque cuenta con un servicio de vigilancia, se encuentra abandonado desde hace más de diez años. Es por ello por lo que Jiménez reclama a este órgano que "vele por la seguridad de los ciudadanos" y "dote de más vigilancia" a este edificio porque asegura "la que tiene es insuficiente según muestran estos hechos".

Jimenez sospecha que este tercer apagón podría haberse producido "el viernes noche o sábado por la mañana" porque los facultativos se han encontrado con varios sistemas que funcionan con batería totalmente descargados, como por ejemplo el desfibrilador tal y como acentúa Jiménez. "Eso es demasiado tiempo sin luz que puede afectar también a la conservación de las vacunas que tenemos en los frigorificos", matiza. Es por ello que insiste en que los tres apagones consecutivos que se han producido en el ambulatorio de Los Bermejales se convierten en "un verdadero problema de salud" y pone de relieve la gravedad de las consecuencias que puede conllevar el hecho de que un centro de salud se quede sin luz durante un largo periodo de tiempo. "El día que se nos presente un infarto y no podamos hacer uso del desfibrilador se nos muere alguien en una camilla", ha sentenciado.