El centro de salud Amate se queda sin pediatras por la baja de sus tres profesionales

El centro de salud de Amate no cuenta en este momento con ningún pediatra. La baja de sus tres especialistas en atención infantil ha dado lugar a esta situación, que los usuarios piden que se revierta y exigen la contratación, al menos, de un sustituto.

"La mayoría de los afectados nos hemos enterado por la Plataforma vecinal Cerro Amate porque todo lo han hecho sin previo aviso. Muchos padres se han dado cuenta porque han ido a coger cita y allí les han dicho que no se podían dar porque no había pediatras", denuncia en declaraciones a este periódico Vanesa Gutiérrez, una de las madres afectadas.

La solución, "mientras duran las bajas", argumentan desde el Servicio Andaluz de Salud (SAS), que insisten en la "falta de profesionales en bolsa", ha sido el traslado de estos pacientes al centro de salud de La Candelaria, "a 600 metros" -apuntan-, por lo que aseguran que "la población pediátrica estará atendida perfectamente". Sin embargo, esta decisión no ha sido bien aceptada por los vecinos afectados que han iniciado movilizaciones y protestas a través de las redes sociales ante el temor de que esto sólo sea "el principio de un cierre del servicio definitivo". "Esta decisión significa un recorte más del servicio de pediatría en nuestro distrito, los niños que eran tratados en el Amate pasarán a ser tratados en el centro de salud de las Candelarias, sin que el mismo aumente su número de consultas ni de pediatras, por lo que todo es una estafa", apostillan desde la plataforma vecinal.

Además, subrayan las mismas fuentes, el de La Candelaria es un centro de salud que "ya de por sí se encuentra saturado por la falta de recursos que padece para atender a una zona tan grande y con tantos problemas sociosanitarios derivados de la situación de emergencia social de los barrios a los que atiende, entre los que se incluye Los Pajaritos".

En señal de protesta, la plataforma vecinal ha convocado para el próximo lunes 13 de diciembre una protesta a las puertas del centro de salud de Amate a las 19:00 horas.

También desde el Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Sevilla se han hecho eco de esta circunstancia y este jueves han protagonizado una concentración en el centro de salud de La Plata, "ante la negativa de la Delegación del Gobierno a realizarla en Amate", denuncian.

Desde CCOO insisten en que "la pésima gestión en recursos humanos del SAS continúa empeorando el servicio público". "Esta es la consecuencia de la decisión del SAS de no renovar a 8.000 profesionales de la sanidad andaluza, y así es imposible mantener una mínima calidad en los servicios prestados", denuncia el secretario de Atención Sindical del Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO en Sevilla, Juan José Limones. "Va a ser muy difícil que una plantilla ya de por sí diezmada pueda hacer frente a una nueva sobrecarga de trabajo", añade.

El de Amate no es el primer centro de salud que se queda sin pediatras en la zona. Concretamente, hace un año se cerró el servicio en el barrio de Palmete, por circunstancias similares, y no se recuperó hasta seis meses después tras las continuas quejas vecinales que reclamaban la incorporación de profesionales. La situación de este centro de salud sigue siendo complicada tal y como ha denunciado recientemente el diputado de Unidas Podemos por Andalucía, Ismael Sánchez, que ha advertido de que las familias de esta zona de la ciudad tienen que esperar "demasiados días para ver atendidos a sus hijos, trasladarse a otros centros sanitarios o acudir a urgencias cuando se presenta una enfermedad".

El déficit de pediatras no es algo nuevo en la provincia. Según denunció el Sindicato Médico de Sevilla en este periódico hace algunas semanas, una de cada cuatro plazas de pediatra en Sevilla no está cubierta por un especialista. La provincia cuenta con 290 cupos de Pediatría en Atención Primaria de los que 54 son atendidos por Médicos de Familia y en torno a 25 están desiertos de manera sistemática por falta de profesionales.