El trayecto entre la UPO y la estación del Metro tendrá toldos en el verano de 2023

Habrá más sombra en la Universidad Pablo de Olavide (UPO) el próximo verano. La institución académica colocará toldos en el trayecto que une las sedes de sus centros de estudio con la estación de Metro, un sendero de 500 metros que recorren a diario cientos de estudiantes, profesores y trabajadores.

Se trata de una mejora que ya estaba contemplada en los presupuestos aprobados por la Olavide para 2022. Su coste ronda los 150.000 euros. Sin embargo, los problemas surgidos los últimos meses con el suministro de materiales ha impedido que las obras comenzaran en plazo.

El rector de la UPO, Francisco Oliva, ha informado este martes, durante una visita a las instalaciones universitarias con motivo de las bodas de plata de la universidad, de que los trabajos arrancarán el próximo enero, con el objetivo de que estén concluidos cuando regrese el calor. Se trata de un camino muy transitado que cuenta con escasa sombra (los árboles que lo flanquean son de escasa altura) y donde el andar se hace difícil cuando el termómetro supera los 30 grados, una temperatura que se ha registrado en Sevilla hasta finales de octubre.

La afección al patrimonio

Para ello, se cubrirán 500 metros con unas velas fabricadas con telas transpirables, un tejido similar al empleado en otras zonas del campus en las últimas intervenciones. El empleo de estos toldos no es posible en la Plaza de América, un enclave duro y que pasa por ser el más característico de la UPO. Aquí se encuentran los edificios del Rectorado, el Paraninfo y la cafetería (antiguamente era una hangar de autobuses cuando hasta los años 70 estas instalaciones las ocupaga la universidad laboral).

Este impedimento se debe a la declaración del conjunto de edificios que albergan los centros de estudio como Bien de Interés Cultural (BIC), al constituir uno de los referentes del movimiento moderno en Sevilla. Hasta tal punto llega la declaración patrimonial que no ha sido posible instalar placas fotovoltaicas arriba de los edificios que componen el conjunto, por su afección visual. Para hacerlo, se requieren unas medidas especiales para las placas, que harían enviable el proyecto por su alto coste.

Otras mejoras

Además de la instalación de toldos para aportar sombra en dicho sendero, se reformarán las pistas de atletismo con una inversión que supera el millón de euros y se recuperará el antiguo edificio de la Térmica (al final del campus), que servirá para salas de trabajo y coworking. Se está a la espera de que el Gobierno concrete la fecha para que se inicie la construcción del nuevo Instituto de Toxicología en estos terrenos, cuya sede actual se encuentra frente al cementerio de San Fernando, cerca del barrio de San Jerónimo.

La UPO ya aprobó el pasado octubre el plan de ahorro energético, por el que pretende reducir este consumo un 30% y evitar que la factura eléctrica se incremente en dos millones de euros los próximos meses. Entre las medidas implantadas, como ya informó este periódico, se encuentran el uso moderado de la calefacción y el aire acondicionado, el teletrabajo durante las tardes en los edificios administrativos y las clases al aire libre, una modalidad por la que ya se optó en el curso 2020/21, durante la pandemia del Covid.