La calle Cerrajería contará con un hotel de dos estrellas

Un nuevo hotel junto a la calle Sierpes. Hace apenas unas semanas que han comenzado las obras de ampliación y reforma en el número 29 de la calle Cerrajería, un inmueble que durante muchos años acogió los populares recreativos Las Vegas, para su conversión en establecimiento hotelero. El alojamiento, prácticamente en la esquina con la calle Sierpes, contará con dos estrellas y 17 habitaciones que se distribuirán en planta baja, dos en altura y un ático. La superficie total de la parcela es de 340,18 metros cuadrados, mientras que la superficie construida asciende a 821,42 metros cuadrados.

Tras muchos años cerrado, el edificio de los recreativos Las Vegas contará con un nuevo uso residencial público. La comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo dio la oportuna licencia de obras el pasado 31 de enero al proyecto presentado por Systems Centros de Formación. La parcela en cuestión limita por ambos lados de la calle con locales comerciales y viviendas y por su extremo sur (parte trasera) con un patio privado de viviendas. El solar se encuentra en suelo urbano y la construcción actual carece de protección. El inmueble presenta una pendiente nula o casi inexistente y no presenta desniveles en su acceso a la calle Cerrajería.

El programa para construir el hotel de dos estrellas se desarrolla en diferentes niveles, planta baja más dos y un ático. Según se explica en el proyecto, redactado por el arquitecto Javier Morales Rodríguez, se contemplan un total de 17 habitaciones, todas ellas dobles, y una adaptada para discapacitados. Para dar cabida a la ventilación e iluminación requerida para las habitaciones se ha practicado la apertura de dos patios y desplazado la escalera del inmueble. La mayoría de las zonas destinadas a apoyo y servicios del hotel estarán situadas en la planta baja y las zonas exteriores en la cubierta, quedando las plantas intermedias para los servicios necesarios para los dormitorios y las propias estancias de los huéspedes.

En la planta baja se ubicará un bar que dará servicio al hotel, "conformando un solo espacio acristalado desde la fachada hasta el primero de los patios". Anexo a esta zona se situará el acceso al establecimiento, "compuesto por un ancho pasillo que adquiere el carácter de estancia con un sistema de pendientes y mesetas que van adaptando la diferencia de cota del fondo del edificio a la de calle". La zona de recepción y atención al usuario se encontrará en esta zona anejada al primero de los patios y que limitará con éste mediante un paño de vidrio de suelo a techo dotando a la entrada de mayor confort visual e iluminación.

En la cubierta, el hotel contará con una piscina, un solárium y una terraza para uso de los huéspedes del hotel. Los sistemas de comunicaciones se unirán al patio mayor para conformar un sólo núcleo vertical donde se agruparán las escaleras y el ascensor. Las ventanas y huecos de apertura del hotel se concebirán como "un sistema compacto de suelo a techo en agrupaciones de paños de vidrio que dan cabida a puerta, vidrio fijo y vidrio practicable", logrando así la mayor de las ventilaciones e iluminación para todas las estancias. Los dos patios existentes serán ornamentados con jardines verticales, "que dotan de confort térmico y visual al huésped del hotel".

En cuanto a la distribución de las habitaciones, tres de ellas estarán situadas en la planta baja, siete irán distribuidas en la primera planta, otras siete en el segundo piso; mientras que la última se encontrará en el ático. La superficie construida será de 281 metros cuadrados en la planta baja, 240 metros cuadrados en la primera y la segunda y 59,55 metros cuadrados en el ático. El proyecto absorberá los desniveles internos del edificio con rampas sustituyendo así los escalones existentes del forjado de dos niveles que tiene el edificio en todas sus plantas. Asimismo, el acceso a la cota más elevada en la planta baja se salvará mediante un sistema de rampas y mesetas conforme a la normativa vigente.