Cae en Sevilla el Tripocho, un conocido delincuente de las Tres Mil Viviendas

La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a un conocido delincuente apodado el Tripocho durante una reciente actuación en las Tres Mil Viviendas a raíz de una fiesta ilegal en la vía pública el pasado viernes. El ahora detenido habría intentado zafarse de los agentes apoyado por un grupo de personas con las que se encontraba en el momento de la aparición de los policías, enfrentamiento en el que un agente sufrió la rotura del dedo de una mano.

Criado en las Tres Mil Viviendas, el líder de la banda está relacionado también con el cultivo ilegal de marihuana, el Tripocho, cuyo nombre responde a las iniciales A.J.B, es uno de los delincuentes más conocidos de Sevilla, con múltiples antecedentes por todo tipo de delitos y que se ha visto implicado en los últimos años en atracos y secuestros, entre otros asuntos. La Policía Nacional achacó a la banda que lidera atracó con extrema violencia que sufrió el pasado noviembre una oficina de recaudación de máquinas tragaperras de Estepona. Entonces, se detuvo a cinco miembros de la banda.

En febrero de 2022, la misma banda fue detenida por atracar a un representante de joyas de Bami, al que le sustrajeron mercancía valorada en más de cien mil euros. El líder del grupo negó su participación en estos hechos y aseguró que había comprado las joyas.

Entretanto, no es la primera intervención policial en las Tres Mil Viviendas en las últimas semanas por fiestas en la calle, que se cconviertenen una práctica habitual durante las fechas navideñas en el barrio. En la madrugada del lunes 23 de diciembre dos personas fueron detenidas por haber agredido, igualmente, a la Policía Local cuando intervenían por las molestias ocasionadas con motivo de una celebración en la vía pública. Según confirmaron fuentes municipales, las dos personas fueron arrestadas por agresión a un agente, a uno de los cuales llegaron a tirarles sillas, por lo que tuvieron que ser reducidos.

La intervención se desarrolló tras varios avisos ciudadanos y los agentes se encontraron al llegar una congregación de unas 80 personas en estado de embriaguez en una fiesta ilegal animada con tres altavoces de gran calibre funcionando a excesivo volumen. La Policía Local montó entonces un dispositivo para disolver la concentración y, cuando se encontraban identificando al responsable, la multitud comenzó a lanzar hielos, botellas de vidrio, piedras, sillas y mesas contra los agentes, llegando a impactar a algunos de ellos.

Como consecuencia de la agresión a los agentes, se procedió a la detención de dos personas. Una de ellas agredió a un agente y tuvo que ser reducido entre policías. El otro tiraba sillas a los agentes, teniendo que ser reducido también entre policías, oponiendo una fuerte resistencia a su arresto. La Policía intervino los tres altavoces.