Cae en Sevilla una banda de ladrones de cobre en plantas fotovoltaicas

La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al robo de cobre en plantas fotovoltaicas de la provincia de Sevilla. Estos hechos tienen como denominador común el que todas las instalaciones se encuentran en fase de construcción, debiendo instalar acometidas que llevan grandes cantidades de este material en diversas formas.

Según informó este martes el instituto armado, la operación fue desarrollada por agentes del Equipo Roca junto con el Área de investigación del Puesto Principal de Carmona, los cuales vienen investigando delitos de sustracción de cableado de cobre en plantas fotovoltaicas. Como consecuencia de estas pesquisas realizadas, abrieron dos líneas de investigación en relación a la identificación de la autoría.

La primera intervención fue en una chatarrería de Sevilla, con casi 2.000 kilogramos de cobre que habían sido entregados por dos trabajadores de una de las plantas afectadas. Por este motivo, entre los días 26 y 29 de julio del mes actual, se procedió a la detención de dos personas que pertenecían a la empresa, y que que tenían como función la instalación de las acometidas de dicho cableado. Los investigadores constataron que la sustracción del cableado les reportó un beneficio de algo más de 9.000 euros.

La segunda línea de investigación seguida fue la detección y obtención de información sobre un grupo afincado en la barriada de Torreblanca de Sevilla, el cual estaría activo por toda la provincia. El pasado 10 de julio se procedió a la identificación de un vehículo y a la detención de sus dos ocupantes, que transportaban más de 12.000 kilogramos de material metálico y de cobre utilizado para la construcción de este tipo de instalaciones.

Una vez identificados a los supuestos autores, se localizó la procedencia del cableado, siendo esta una planta en fase inicial de construcción teniendo esparcidos diferentes depósitos por la extensión de la finca. El material intervenido fue reconocido y entregado a la parte perjudicada, que valoró dicho material en más de 16.000 euros.