Una banda de narcotraficantes de Sevilla controlaba a la Policía con cámaras de vigilancia
La Policía desmantela tres narcopisos de Madre de Dios y sorprende al líder intentando deshacerse de 40.000 euros
La operación se inició el 5 de noviembre
Sevilla/La banda de narcotraficantes desmantelada el pasado mes de noviembre en Madre de Dios controlaba a la Policía mediante cámaras de videovigilancia. Así lo ha informado este jueves la Policía en una nota de prensa, en la que da a conocer el balance de la operación Sísifo, en la que se desmantelaron tres narcopisos de esta barriada próxima a Los Pajaritos.
En la operación fue detenido el cabecilla de la organización, sobre el que pesaban varias reclamaciones judiciales. se encuentra ya en prisión provisional. La investigación apuntaba a que la organización criminal se encontraba distribuida en hasta cuatro escalones de responsabilidad diferentes, existiendo sujetos encargados de las distintas labores, tanto dedicados a la venta de sustancia así como a la guarda de droga, repartiendo la organización todos sus recursos en distintos inmuebles, procurando con ello abstraerse de las incautaciones policiales.
Uno de los aspectos más relevantes para los agentes fue comprobar cómo la organización contaba con un monitor en el que se emitía en directo las imágenes captadas por cámaras de seguridad que controlaban las calles aledañas a los narcopisos.
El dispositivo policial, bautizado bajo el nombre Operación Sísifo, se llevó a cabo de manera simultánea en 8 emplazamientos distintos, contando con un amplio despliegue policial, y procediendo a la entrada de viviendas de los miembros de la organización, incluida la vivienda del líder, a quien se sorprendió mientras intentaba deshacerse de casi 40.000 euros en efectivo y medio kilo de cocaína.
Por otro lado, el principal punto de venta estaba situado en un bajo. Contaba con una puerta de seguridad con múltiples cerraduras, y en el interior del mismo se hallaban tres de los vendedores de la organización. Este piso disponía además de una vitrina con carteles donde mostraban las sustancias y los precios de las mismas, así como las distintas ofertas.
La Policía destaca que, una vez finalizaron todos los registros, los investigadores se aproximaron a los bloques registrados dos días después, comprobando como el punto de venta principal se encontraba de nuevo en funcionamiento. Por este motivo, solicitaron a la autoridad judicial correspondiente otros dos registros más, incautándose más sustancia y dinero.
Finalmente y como resultado de la investigación, se desmantelaron varios pisos empleados como puntos de venta, así como pisos intermedios donde se ocultaban las cantidades listas para recargar el punto de venta, llegándose a intervenir un total de medio kilo de cocaína, 250 gramos de MDMA, un kilo y medio de hachís y medio kilo de marihuana, así como unos 50 comprimidos de cocaína rosa (tussi); además de tres balanzas de precisión y más de 40.000 euros.
Finalizadas las diligencias policiales, los detenidos fueron puestos a disposición de la autoridad judicial por los delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas, y tenencia ilícita de armas.
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