Cae en las Tres Mil una banda que robaba en pisos tras sustraer las llaves de los coches

Se han intervenido joyas, dispositivos informáticos, dinero, una escopeta, una catana y marihuana

Uno de los detenidos en la operación es el presunto autor del robo en la Hermandad de la Sed

Operación Parrot de la Policía Nacional
E.P.

09 de septiembre 2021 - 10:39

SEVILLA/La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado, dentro de la operación conjunta denominada Parrot, a una banda radicada en las Tres Mil viviendas y que estaría especializada en el robo de viviendas tras haber sustraído previamente las llaves de los domicilios cometiendo robos con fuerza en vehículos.

En este marco, tal como informan ambas instituciones en sendos comunicados, se han realizado cuatro registros domiciliarios en el barrio sevillano de Las Tres Mil Viviendas y se ha detenido a tres personas, de entre 20 y 50 años de edad, a las que se les imputa los delitos de pertenencia a grupo organizado, robo con fuerza y tenencia ilícita de armas. Además, en una de las viviendas registradas se ha localizado una plantación de marihuana, por lo que se ha detenido por un delito contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico a una cuarta persona, el padre de uno de los detenidos, que permanecía escondido al tener varias reclamaciones judiciales de ingreso en prisión.

Por toda Andalucía

"Los detenidos se movían con gran rapidez por cualquier lugar de la geografía andaluza para perpetrar los robos", advierte. La operación se inició cuando los agentes detectaron una serie de robos con fuerza en interior de vehículos estacionados en la zona de la Cartuja de Sevilla, en concreto en las cercanías del parque temático.

En estos robos, según señala, los delincuentes se apoderarían de los juegos de llaves que los propietarios de los vehículos guardaban dentro de los turismos, así como de la documentación donde se reflejaba la dirección del domicilio. Posteriormente, se trasladaban hasta las viviendas y, utilizando las llaves sustraídas, "se apoderaban de todos los objetos de valor, con la total impunidad de saber que las víctimas tardarían horas en volver".

Con movilidad interprovincial, detalla que "estaban dispuestos a desplazarse a cualquier punto de la geografía andaluza para cometer los robos". De esta manera, se habrían cometido hasta ocho robos, repartidos entre Málaga, Gelves (Sevilla), Peñaflor (Sevilla), San Fernando (Cádiz), Sevilla capital y Huelva. De este último se recuperó una escopeta del calibre 12/70 en el registro domiciliario de uno de los detenidos, que guardaba en su dormitorio y estaba preparada para disparar.

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