El Tagarete, de arroyo a importante colector de Emasesa
Urbanismo
El Ayuntamiento está limpiando los 1,7 kilómetros del cauce que discurre bajo tierra entre Juan de Mata Carriazo y el Paseo de Colón
Infografía: La limpieza del Tagarete.
El Tagarete vuelve a ver la luz. Emasesa está procediendo a la limpieza de buena parte del cauce del arroyo que discurre bajo tierra y que actualmente se utiliza como gran colector de la red de saneamiento. Estas actuaciones han deparado la apertura de varias ventanas en diversos puntos de la ciudad que han permitido ver la excepcional obra de ingeniería que se realizó a mediados del siglo XIX para enterrar este riachuelo que nace en la comarca de los Alcores y que durante muchos siglos marcó el límite oriental de la ciudad. Los trabajos de saneamiento comenzaron el pasado mes de agosto y tienen un presupuesto de licitación superior al medio millón de euros.
Hay que remontarse a principios de los años 80 para encontrar una actuación similar en el arroyo. El equipo de la empresa Ullastres que acomete la limpieza del Tagarete trabaja actualmente en la esquina de la Fábrica de Tabacos con la calle San Fernando. Allí han abierto una gran ventana para introducir la maquinaria necesaria para limpiar el cauce del arroyo. Comenzaron a trabajar el 16 de agosto en la calle Luis Montoto a la altura de Juan de Mata Carriazo, justo bajo los caños. La segunda ventana que abrieron para resanar el cauce fue en la calle Bartolomé de Medina; Tras actuar en la ubicación actual, abrirán un nuevo arquetón en la intersección de María de Padilla con San Fernando; y finalizarán en el cruce de Almirante Lobo con el Paseo de Colón, donde el Tagarete se une al colector emisario de la red que lleva el agua hasta la estación depuradora de El Copero. "Actualmente se utiliza el mismo cauce del antiguo arroyo como colector. Uno no se imagina la envergadura que tiene esto hasta que lo ve. Es precioso, muy bonito", explica Antonio Javier García, del departamento de Saneamiento de Emasesa y director del proyecto de obra.
El encauzamiento y cubrición del arroyo Tagarete se inicia en el año 1849, aunque no se concluye en su totalidad hasta los años 20 del pasado siglo. La estructura abovedada de ladrillos de taco y cal que cobija al arroyo es de gran belleza. El tubo, que recuerda al túnel de un metro, está divido en dos canales. El mayor, que es el del arroyo propiamente dicho y uno más pequeños que transporta aguas fecales. En su tramo más amplio tiene unos 4,60 metros de diámetro. En total se limpiarán casi 1,7 kilómetros del colector. Antes de desembocar en el emisario, que discurre por el Paseo de Colón, el Tagarete circula oculto por José María Moreno Galván, Bartolomé de Medina, Menéndez Pelayo, San Fernando, Puerta de Jerez y Almirante Lobo. En el Parque Miraflores todavía se puede ver en superficie un pequeño tramo del Tagarete, aunque el cauce está muy reconstruido.
La limpieza que se está llevando a cabo consiste básicamente en la extracción de lodos, tierras y cualquier elemento interior que impida el correcto funcionamiento del colector, de forma que canal y banquetas queden libres de cualquier depósito. En las paredes, pozos en galería y conexiones con otros colectores, se retirarán todos aquellos elementos que dificulten la circulación del agua. Para ello es necesario introducir maquinaria pesada, como explica Jesús Vela, de la empresa Ullastres: "Cuando se construyó no se contemplaba que tantos años después íbamos a venir a meter maquinaria para limpiarlo. El colector cuenta con 34 pozos de entrada por los que se puede bajar, pero hay que abrir estos arquetones para realizar los trabajos".
El Tagarete lleva más de 35 años acumulando residuos, aunque actualmente el arrastre de barro y tierra ha disminuido porque casi todas las zonas por las que discurre están urbanizadas. La limpieza es esencial para aumentar la capacidad del colector y optimizarlo durante las lluvias. "En las últimas del mes de octubre casi se llegó casi al límite de la capacidad, expone Agustín Rodríguez, del departamento de Saneamiento de Emasesa.". Ya se han retirado más de 1.500 toneladas de material para permitir que agua fluya con normalidad.
El trasvase de agua que soporta el colector en pleno siglo XXI es mucho mayor que hace cien años, por lo que Emasesa, como indica Antonio Javier García, tienen la intención de aumentar la frecuencia de limpieza. "Cada vez de manera más periódica porque hay una mayor concienciación de fomentar las actuaciones preventivas. Es una mejora importante. También durante estos años ha habido más disponibilidad presupuestaria para actuar".
En la calle San Fernando, el Tagarete servía de defensa natural a la Fábrica de Tabacos. En su flanco norte hacía las veces de foso, motivo que explica que el recinto sólo disponga de un foso de tres caras. Esta fortificación defensiva se llenaba con el propio caudal de Tagarete. El arroyo también era útil para proporcionar humedad a los sótanos de la fábrica. El cauce bajo tierra actual discurre por debajo de la capilla de la Universidad y circula en paralelo a la fábrica antes de llegar a la Puerta de Jerez.
Los técnicos de Emasesa y los responsables de la limpieza calculan que todavía quedan algo más de tres meses trabajo en el colector, aunque todo dependerá de las lluvias, ya que se ven obligados a parar y a sacar toda la maquinaria.
La Empresa Metropolitana de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas de Sevilla también está limpiando de manera paralela el colector emisario. Ya se ha actuado en más de 600 metros durante la primera fase de estos trabajos, que abarcan de la Plaza de la Legión hasta el Ifni.
1 Comentario