La ampliación del Metro sigue paralizada

La ampliación del Metro con las tres líneas que faltan para completar la red aprobada sigue paralizada por el enfrentamiento político de las administraciones. La Junta de Andalucía (PSOE-IU) y el Ayuntamiento de Sevilla (PP) llevan años culpándose mutuamente de una parálisis que se agudizó con el cambio político en la Alcaldía sevillana (mayo de 2011) y en el Gobierno andaluz (marzo de 2012). Ninguno se sienta en serio a negociar y tampoco lo hacen ahora que se conmemora el quinto aniversario de la primera línea. En estos tiempos de crisis la falta de dinero y de financiación bancaria es evidente, pero ni siquiera se sientan a fijar sus prioridades.

Este miércoles le tocó el turno de queja al viceconsejero de Fomento y Vivienda de la Junta, José Antonio García Cebrián (IU), quien señaló al Ayuntamiento de Sevilla como responsable de que la ampliación del Metro aún no se haya abordado en una reunión tripartita con el Gobierno central. "Estamos esperando que el Ayuntamiento nos convoque, pero no sale de la Plaza Nueva", se quejó el viceconsejero en declaraciones a la prensa antes de inaugurar unas jornadas de movilidad en el convento de Nuestra Señora de los Reyes de la calle Santiago.

El número dos de la Consejería de Fomento advirtió de que esa comisión a tres bandas fue un acuerdo que tomó el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla de Juan Ignacio Zoido en 2012 por unanimidad.

En efecto, el 28 de septiembre de 2012, todos los grupos municipales (PP, PSOE e IU) aprobaron en Pleno una moción sobre el Metro de Sevilla. El primer punto sólo fue aprobado por la mayoría del PP: pedir a la Junta que reconsidere su postura de dejar paradas las obras del Metro por la crisis.

Los otros tres puntos de la moción sí se aprobaron por unanimidad pero no se han cumplido. Primero pedir a la Junta que buscara la financiación para licitar y construir la red completa de Metro. Segundo, solicitar a la Junta y al Ministerio de Fomento la creación de una comisión tripartita donde esté presente el Ayuntamiento para analizar el asunto de la financiación de las tres líneas que faltan y las necesidades de movilidad de la ciudad.

Tercero, el Ayuntamiento se comprometía "a crear una comisión" interna "formada por los tres grupos políticos para determinar las prioridades en la construcción de las futuras líneas de Metro y todas las grandes infraestructuras de movilidad previstas en el PGOU" de 2006.

García Cebrián defendió que, de las tres administraciones que deben sentarse en esa comisión, sólo la Junta está comprometida con el Metro de Sevilla con su aportación de 48 millones de euros que pone al año para su funcionamiento, "un fuerte desembolso anual de dinero público". El viceconsejero recordó que la Junta de Andalucía asume "en solitario" esta subvención que hace posible que el Metro de Sevilla "tenga precios asequibles, y que sea el único que no incrementa su precio desde 2010".

El número dos de Fomento y Vivienda de la Junta afirmó que "la ciudad de Sevilla ha hecho suyo el Metro. La ciudadanía lo conoce, lo valora y lo considera fundamental, y eso es lo mejor que puede decirse de un servicio público", señaló durante la inauguración de las jornadas Movilidad, Ciudad, Sociedad. Recordó que en estos cinco años ha transportado más de 67 millones de viajeros y se ha consolidado como un Metro eficiente con un impacto favorable sobre la movilidad y el medio ambiente y una valoración de la ciudadanía de 8,2 sobre 10. "El Metro de Sevilla es un éxito", señaló y agradeció especialmente su tarea diaria "a los trabajadores y trabajadoras del suburbano".

Los tres proyectos constructivos de la 2, 3 y 4 están redactados y terminados desde diciembre de 201. El Ayuntamiento no ha dicho aún qué quiere cambiar o modificar de esos proyectos y qué líneas y tramos deben tener prioridad. A la Junta no le falta responsabilidad: no pone dinero en sus presupuestos anuales para iniciar otras líneas del Metro ni acepta hacer la obra a medias con capital privado. Y el Gobierno central dejó claro en 2012 que no pondrá un euro para el Metro de Sevilla mientras dure esta crisis económica.

Esa misma parálisis afecta a otras asignaturas pendientes de movilidad: la conexión del Cercanías de la Cartuja con el Metro de Los Remedios en Blas Infante (una competencia estatal) y la ampliación de los carriles bici de la capital (una competencia de la Junta y del Ayuntamiento).

No ha habido negociaciones sobre el Metro después de noviembre de 2009, cuando se inauguró la primera línea completa con las estaciones nazarenas. El Ayuntamiento de Zoido no ha dejado de presionar a la Junta para que ponga dinero para toda la red.