Con ADN sevillano: Ramón Morillo
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El blog personal del alcalde de Sevilla (smsevilla.wordpress.com) decía ayer bien claro que su idea es culminar las obras de la Encarnación, pese al dictamen negativo del Consejo Consultivo de Andalucía a que se inyecten otros 30 millones de dinero público en las setas. "Es bueno que peguemos un salto en el tiempo para entender bien la importancia de esta obra y lo vital que es para la ciudad la culminación definitiva del proyecto", reza el destacado de Monteseirín que puede leerse en su página. Así pues, la posición del PSOE municipal está más que clara en este asunto, a dos días del Pleno monográfico convocado el miércoles por Monteseirín para decidir el futuro de estas polémicas obras del centro. Con este Pleno especial, el alcalde quiere que sea la Corporación municipal la que tome la decisión, en lugar de hacerlo él en solitario con sus concejales.
La incógnita es su socio de gobierno. Izquierda Unida se resistió ayer a desvelar a la prensa si se abstendrá de nuevo o votará a favor, pero lo más probable es que repita la jugada del pasado 31 de mayo, cuando se abstuvo y obligó al PSOE a contar con el voto de calidad del alcalde para sacar adelante precisamente la última parte de la modificación presupuestaria de 30 millones que ahora ha rechazado el Consejo Consultivo de Andalucía. En aquel Pleno el voto en contra del PP y la abstención de IU provocaron un empate de 15 a 15 entre el sí del PSOE y el no del PP que tuvo que desbloquear Sánchez Monteseirín.
Según fuentes de grupo municipal de IU, el portavoz Antonio Rodrigo Torrijos no hablará hasta el Pleno del miércoles y aclararon que el grupo está debatiendo estos días internamente la postura que tomará en la votación.
El PP tampoco ha explicado si volverá a votar en contra el miércoles, pero lo más probable es que se oponga. Su portavoz, Juan Ignacio Zoido, declaró ayer a la prensa que "habrá que buscarle la mejor salida para que el impacto sea el menor posible", y apostó por dar con la solución más sensata que aporte dinero y sobre todo le dé viabilidad a un proyecto que considera "megalómano y capricho del alcalde". Zoido dejó claras sus críticas contra el desfase presupuestario y los retrasos que acumula esta obra, y recordó que tampoco se sabe si los trabajos que quedan se pueden acabar sin riesgos.
Al margen del Ayuntamiento, los comerciantes del centro también son partidarios de acabar las obras de la Encarnación y luego ya se pedirán las responsabilidades oportunas. "Entendemos que el precio es excesivo, pero después de cuarenta años ahora no pueden decir que hay un desfase presupuestario y paralizar la iniciativa", advirtió su presidente Enrique Arias, quien criticó la indolencia del Ayuntamiento.
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