Dos 'águilas' gemelas con 500 años de diferencia

Pese a que consta en alguna lista negra de los movimientos pro memoria democrática y a que apareció en este periódico en un reportaje sobre los últimos restos de simbología del régimen de Franco que quedan en lugares públicos de Sevilla, el águila que se ubica en la base del Monumento al Descubrimiento de los Jardines de Murillo (1929) nada tiene que ver con el anterior jefe del Estado y sí con los monarcas que impulsaron la expedición de Cristóbal Colón y la unidad de lo que actualmente conocemos como España: los Reyes Católicos.

Es cierto que ambos escudos son prácticamente gemelos, pero esto se debe, sobre todo, a que el régimen emanado del 18 de julio gustó de recrear a su modo la estética y la retórica de los años en los que España construyó su imperio europeo y de ultramar. Sin embargo, como pasa con todos los gemelos, hay algunos pequeños detalles que los diferencian. Efectivamente, si en el escudo de los Reyes Católicos como el que nos ocupa aparece el águila de San Juan, el yugo y las flechas (símbolo del matrimonio compuesto por Isabel y Fernando) y las armas de Castilla, León, Aragón y las Dos Sicilias; en el de Franco, por su parte, constan el águila, el yugo y las flechas y las armas de Castilla, León, Aragón y Navarra, reino que se incorporó a la monarquía hispánica con posterioridad a Isabel la Católica. Asimismo, en los escudos de los Reyes Católicos como el de los Jardines de Murillo tampoco figuran las Columnas de Hércules con la leyenda Plus Ultra -motivo que se incorporó a la heráldica española con Carlos V en alusión a la gesta del descubrimiento-, ni la filacteria del Una, Grande y Libre, uno de los lemas favoritos del anterior régimen.

Aunque en ambos escudos es normal que aparezca el motivo de la granada en recuerdo a la conquista del antiguo reino Nazarí -una de las principales empresas de los Reyes Católicos- en el de los Jardines de Murillo no aparece este fruto, ya que el escultor Lorenzo Collaut Valera, autor de la pieza, se inspiró en el modelo de la Iglesia de San Juan de los Reyes de Toledo para su realización, según las investigaciones realizadas por Juan Manuel Covelo López.